Preocupa la caída en los commodities
La recesión global determina poca demanda de materias primas de todo tipo y bajos precios. Todo esto se refleja en los futuros del CRB (Commodity Research Bureau) que continúan declinando a paso firme.
Si bien es cierto que recién comienza la campaña en Sudamérica, antes en Brasil que en nuestro país, las expectativas con respecto a las futuras producciones de la región son buenas.
Tomando como comienzo de la serie el año 1951, se consigna que en 18 de las últimas 24 temporadas en las que el informe de producción de soja estadounidense de octubre superó al de setiembre, el resultado final de la campaña de enero excedió al revelado en octubre en un promedio de 2,2%. Este año hay que tomar en cuenta que pudo existir algún ligero daño por heladas que no se reflejaron en este informe que tomó la situación de cultivos imperante al 1 de octubre, antes de estos eventos.
En su estimación mundial de oleaginosas, el USDA incrementa la producción de soja, pero introduce pocos cambios en las producciones de otras semillas.
La producción mundial de colza alcanzará los 36,7 mill/t, contra 37,4 del año anterior y 42,4 de 1999.
La baja productividad se atribuye a la mala cosecha de Canadá que baja de 7,12 mill/t de 2000 a solamente 4,8 mill/t en esta campaña. La cosecha mundial de girasol alcanzaría los 21,99 mill/t, contra 22,84 de 2000 y 27,16 de 1999. La ex URSS cae en algo más de 2,4 mill/t en esta temporada, y su cosecha alcanzará solamente los 5,4 mill/t, en tanto declinan ligeramente los EE.UU. e incrementan su producción la CEE, Europa del Este y la Argentina, que pasaría de 3,19 mill/t del año anterior a 3,7 mill/t en el 2001, siempre y cuando el clima permita una implantación a tiempo. La semilla de algodón y el maní experimentarán, por su parte, incrementos productivos importantes.
El primero pasará de 33,41 mill/t a 36.22 mill/t, en tanto el maní saltará de los 31,17 alcanzados durante 2000 a 33,59 mill/t en esta campaña.
En maíz, el USDA también sorprendió con sus buenas cifras de producción en los EE.UU.
Proyección
La demanda proyectada es también alta y bastante optimista tomando en cuenta la posibilidad de una desaceleración importante de la economía, una baja pronunciada en los precios de las carnes y un encarecimiento en los gastos de transporte como consecuencia de mayores costos por el conflicto bélico recién iniciado. Domésticamente, el programa de uso de ethanol va a ser continuado y hasta fortalecido por las autoridades de los EE.UU. que seguramente incentivarán aun más el uso de este tipo de combustible.
Se proyecta que en pocos años más, 60% del consumo americano de petróleo provendrá del exterior lo que fortalece esta idea. El maíz no está pudiendo ser sembrado en nuestro país al ritmo deseado y, dado el grado de anegamiento de muchas regiones, es posible que veamos un cambio en la intención de siembra de este producto a soja, allí donde las rotaciones lo permitan. De lo que sí estamos seguros es que el número del USDA referido a nuestra campaña 2001/'02 en maíz, de 15,5 millones de toneladas requerirá ser revisado hacia abajo en el informe del mes entrante, reflejando la poca actividad de siembra de este mes y los bajos rendimientos esperados en caso de poder implantarse tardíamente.
Una cifra de producción argentina por debajo de los 15 mill/t, que hoy no resulta nada pesimista, determinará una caída del saldo exportable de nuestro país al orden de los 10 mill/t.
Los datos semanales del USDA consignaban que ya se alcanzó a cosechar 57% del área correspondiente a soja en los EE.UU., contra 40% de la semana anterior y 63% del promedio histórico. El maíz se encuentra recolectado en 37% contra 29% de la semana anterior y 44% del promedio.
Además, ya se lleva implantado 80% del área correspondiente a trigo de invierno, contra 70% de la semana anterior y 71% del promedio, con los cultivos ya emergidos en 55%.
La semana concluida contó con una serie de ingredientes particularmente desagradables.
Las continuas lluvias en los 60 distritos bonaerenses anegados determinan demoras apreciables en la implantación de granos gruesos, además del perjuicio en los cultivos de trigo ya implantados. Estos factores determinaron un sostenimiento general de precios en el MAT en todos los productos a excepción de la soja que puede implantarse más adelante.
Esto asociado a un mercado flojo en Chicago que no terminó aún de digerir las pesadas cifras de producción de la cosecha americana y a serios interrogantes sobre la evolución futura de la demanda mundial.
Dejá tu comentario