Evo quiere que petroleras paguen ya más impuestos

Luiz Inácio Lula da Silva

La Paz (EFE) - El gobierno de Bolivia espera recibir mañana los primeros pagos por el aumento en los impuestos a las petroleras, previstos por el decreto de nacionalización dictado hace cuatro meses, pero las empresas aún no recibieron una notificación oficial al respecto.

El viernes pasado, el Ministerio de Hidrocarburos divulgó una resolución que obliga a pagar el 1 de setiembre el primer aumento de 32% en el impuesto sobre la producción -antes, en 50%- de los dos mayores bloques de Bolivia, en los que participan Repsol YPF, la francesa TotalFina Elf y la brasileña Petrobras.

Según informó el gobierno de Evo Morales, los demás pagos deberán hacerse el 11 de setiembre (impuestos de junio), el 18 del mismo mes (julio), el día 25 (agosto) y el 2 de octubre (setiembre).

Sin embargo, fuentes de Petrobras dijeron ayer que la empresa, a la que corresponde hacer los pagos como administradora de los dos campos, no recibió hasta ahora ninguna comunicación oficial sobre el particular, por lo que no pueden decir si harán o no algún pago mañana. «Petrobras no se va a pronunciar hasta que reciba al texto completo de la resolución o decreto», explicó una de las fuentes de esa empresa, y agregó que no pueden actuar por noticias periodísticas.

Críticas

En las últimas semanas, la oposición y la prensa de Bolivia criticaron a Morales porque la nacionalización, decretada el 1 de mayo, no generó ingresos al país hasta ahora. También, porque no logró concretar otros aspectos clave del decreto, como el monopolio del negocio de los hidrocarburos para la estatal YPFB, sumida en una crisis que llevó esta semana al relevo de su anterior presidente, Jorge Alvarado, acusado de irregularidades en la firma de un contrato. 

La resolución que fijó las fechas de pago indicó que YPFB comunicará a las petroleras el número de la cuenta del Banco Central en la que deberán efectuar los pagos, cada uno de aproximadamente 30 millones de dólares.

Fuentes del sector energético comentaron, por otra parte, que las petroleras podrían hacer frente a los dos primeros plazos, el del 1 y el del 11 de setiembre, pero tendrían dificultades con los siguientes. Eso es así porque el comprador del gas de esos dos pozos, el gobierno de Lula da Silva, paga después de 70 días de terminado el mes correspondiente y las petroleras no habrían recibido el 18 de setiembre el dinero de lo exportado en julio. Igualmente, no habrían cobrado el 25 de setiembre ni el 2 de octubre los pagos del gas exportado en agosto y en setiembre, respectivamente.

Con el dinero, el gobierno boliviano pretendería fortalecer a YPFB, con el argumento de que por falta de recursos esa empresa no logró asumir el «control absoluto» del negocio de los hidrocarburos, como fijó el decreto de mayo.
Esta norma también estableció la «refundación» de YPFB en los primeros tres meses de la nacionalización, pero ya pasaron cuatro, y hasta ahora, el Ministerio de Hidrocarburos no dio a conocer el proyecto.