Kirchner: "No esperamos inversión en servicios"
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Kirchner habló en un acto en José C. Paz junto a la flamante presidenta de Chile, Michelle Bachelet. Pero lejos de un discurso referido a la integración regional, emprendió con un mensaje de contenido interno. Se refirió no sólo a la situación de Aguas Argentinas sino que también reclamó una baja en los precios de la carne.
• El servicio es pésimo, ya que no llega a la mayoría de los habitantes del conurbano.
• Si la carne está cara, que bajen el precio, que el pueblo me ayude para que todos los argentinos tengan acceso. Basta de sectores de privilegio.
A Kirchner lo acompañaron varios ministros: Julio De Vido (Planificación Federal), Aníbal Fernández (Interior), Alberto Fernández (jefe de Gabinete), Daniel Filmus (Educación), Juan Carlos Nadalich ( Desarrollo Social) y Ginés González García (Salud).
El gobernador bonaerense, Felipe Solá, también presente en el acto, sostuvo que «el sendero de expansión de una empresa que debe brindar agua corriente y cloacas debe ser el sendero de la necesidad, pero en lugar de eso, al privatizar el agua, lo que se consiguió es que el sendero fuera el de la rentabilidad».
En esa línea, agregó que «la inversión va a ser del Estado, y no privada. No esperamos inversión privada en servicios como el agua, no queremos negocios que no deben ser negocios sino servicios sociales. La rentabilidad debe ser social y no una rentabilidad en pesos para que se la lleven afuera».
• Visión
Asimismo, se refirió al servicio de agua en el interior de la provincia: «Aguas Bonaerenses tiene una visión absolutamente distinta de su función, está desde hace muchos años en reemplazo de Azurix, que se escapó del país y nos dejó la concesión vacía. Nosotros ocupamos ese lugar y prestamos el servicio en todo el interior provincial sin problemas».
Solá se mostró confiado en que «con los trabajadores y con la línea gerencial a favor la nueva empresa nacional que cubra la zona de 17 distritos del conurbano, área que abarcaba Aguas Argentinas, va a caminar. Hacerlo peor que Aguas Argentinas va a ser difícil; hacerlo mejor, no».
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