La Argentina estará en la agenda de la reunión de los ministros de Finanzas del G-7, que comenzará mañana en Washington. Así lo adelantó el subsecretario del Tesoro estadounidense para Asuntos Internacionales, Tim Adams: «Creo que esperaremos escuchar de la Argentina cómo evolucionará su plan económico, su perspectiva del tipo de cambio, inversión, exportaciones y el sector energético».
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«Hemos tenido un número de compañías que han expresado algo de preocupación sobre el clima de inversiones en la Argentina. Ciertamente -aseguró Adams- compartiremos estas preocupaciones en forma privada con nuestros pares.»
Adams reemplazó el año pasado a John Taylor, un funcionario que había mantenido importantes lazos con la Argentina, sobre todo cuandoestalló la crisis del período 2001-2002.
Desde la embajada argentina en Washington habían señalado que esta vez el país no estaba en la agenda del G-7, pero las declaraciones del funcionario del Tesoro parecen desmentirlo. Sin embargo, funcionarios del equipo económico aseguraron que «no existe la preocupación sobre la situación del país como ocurrió antes de la reestructuración de la deuda».
El G-7 está conformado por Estados Unidos, Francia, Japón, Canadá, Italia, Gran Bretaña y Alemania. El encuentro previsto para mañana en la capital-estadounidense se realiza en el marco de la Reunión de Primavera del FMI y el Banco Mundial.
Claro que, más allá de algún párrafo dedicado a la Argentina, en realidad el temario de la reunión incluye dos cuestiones centrales: los desequilibrios globales y la propuesta de reforma del FMI.
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