Un triunfo demócrata en EE.UU. no frena acuerdo

La canciller del Paraguay dijo ayer que la negociación de un tratado de libre comercio de todos los países del continente no peligra en la eventualidad de que un candidato del Partido Demócrata gane las presidenciales de los Estados Unidos. Ese partido, ligado tradicionalmente a los sindicatos, ha boicoteado en el Congreso de Washington los avances de esa negociación pero Leila Rachid, que visitó el país en las últimas horas, cree que es imposible volver atrás en lo ya acordado sobre ese sistema de libre comercio, aunque sea poco. En un reportaje con este diario, la diplomática paraguaya repasó la suerte del Mercosur en esa negociación.

Periodista: ¿Hasta dónde es cierto que el Mercosur va a negociar en bloque el ALCA sin que los países se corten solos?

Leila Rachid: Los países del Mercosur luchamos en bloque por la eliminación de los subsidios agrícolas y que la negociación se centre en eso. Es bueno que presentemos fuerza de bloque para que se bajen subsidios, ayuda, créditos, medidas que distorsionan el comercio.
Necesitamos imponer en la mesa negociadora una suerte de fuerza que empuje a lograr eso. No vamos a lograr el máximo; eso se vio en la reunión de cancilleres de toda América en Puebla. Es más, flexibilizamos mucho las posturas que habíamos sostenido hasta entonces.

P.: ¿Es cierto que EE.UU. pone un plazo para el ALCA y después de esa fecha va a avanzar en negociar un tratado de libre comercio con el país que quiera, y el que no quiera que se quede afuera? L.R.: Así está pensado. La declaración de ministros que se firmó en Miami reflejó eso. Lo primero es un acuerdo marco donde se inscriben los principios. El segundo estadio es cuando los países suscriben acuerdos bilaterales, plurilaterales o multilaterales. Ahí es donde cada uno, de acuerdo con su situación económica, va tejiendo su relación dentro del mercado.

P.: ¿Cómo se va a negociar sin que haya dispersión?

L.R.: Primero logrando que la otra parte que negocia contigo sea lo suficientemente comprensiva como para que tu nivel de ambición logre alcanzar el acuerdo. En el marco de la Unidad Europea, por ejemplo, está avanzadísima la negociación porque si bien no van a disminuir o eliminar los subsidios agrícolas vamos a ir poniendo un sistema de cupos.

• Diferencia

P.: ¿Con Estados Unidos eso no marcha?

L.R.: No decimos que sea fácil o difícil. Decimos que es diferente respecto de Europa.

P.: ¿Ve algún resultado para 2005?

L.R.: Sí, lo vemos para 2005, que es cuando concluyen las negociaciones. Ambas partes van a lograr el diálogo comprensivo. Por eso la cumbre de Miami fue un hito. En la reunión de cancilleres sacamos un documento que pretendía en un primer momento un acuerdo marco, como te dije, con pilares esenciales como eliminación de subsidios agrícolas y de toda distorsión del comercio y la promoción de inversiones. Pero necesitamos que sea un acuerdo comprensivo y balanceado de las dos partes.

P.: ¿A EE.UU. le interesa en serio el acuerdo ALCA?

L.R.: Está interesado. Ve en el proceso ALCA el elemento de unión de las regiones y eso le interesa.Nosotros también estamos interesados, hablo como Mercosur, claro.

P.: ¿Un eventual triunfo demócrata en las presidenciales de los EE.UU. puede hacer peligrar el ALCA?

L.R.: Cuando los países toman compromisos, los terminan cumpliendo. Hay que recordar que el proceso lo inició un republicano, Bush Senior; lo concreta en 1994 el presidente Clinton, y evoluciona la negociación con una administración demócrata.

P.: ... cuyos legisladores nunca le votaron el fast track para acelerar la negociación ALCA con influencia del voto demócrata, amigo de los sindicatos...

L.R.: Era tarde como gesto negociador eso, porque Clinton ya salía del cargo. Una nueva administración no puede deshacer todo lo asumido por la anterior. La globalización impacta también en los congresos y algunas ideologías son más o menos propensas a admitir estos acuerdos.

P.: No hay temor a un freno demócrata...

L.R.: No, por lo menos para que en 2005 firmemos el acuerdo marco. Y después vamos a seguir empujados por ese compromiso.

P.: ¿Paraguay va a buscar un acuerdo de país a país con EE.UU.?

L.R.: Nuestra realidad hoy es negociar desde el Mercosur. Pero tenemos ya un buen diálogo bilateral con Estados Unidos. Tenemos un acuerdo comercial que firmamos el año pasado que crea una mesa de diálogo sobre comercio e inversiones. Pero es el mismo tipo de relación bilateral que tienen los demás países del Mercosur con Estados Unidos. Pero ir a un acuerdo de libre comercio, hoy para Paraguay se va desde el Mercosur. Nos sentimos identificados con el bloque, hablamos el mismo lenguaje, más allá de todas nuestras asimetrías intrínsecas.

P.: Una misión militar de los Estados Unidos visitó Asunción hace dos semanas y ofreció a su gobierno el envío de tropas a Irak. ¿Qué van a responder?

L.R.: Es cierto que vino un grupo de representantes del Pentágono; también estuvo el comandante de las fuerzas españolas, que son las que encabezan el grupo Plus Ultra en Irak. Pero sólo mantuvimos conversaciones. Hasta ahí llegamos. No existe nada que formalice nada...

P.: Pero el pedido de envío de tropas existió...

L.R.: En la entrevista que mantuvieron en Washington el presidente Bush y Duarte Frutos se intercambiaron opiniones en torno a las fuerzas de reconstrucción que envían algunos países a Irak. Sobre todo al amparo de la Resolución 1.511 de la ONU que habla de participar de la reconstrucción pero que no crea una fuerza de paz, como ocurrió en otros casos. Sí insta a los países a colaborar en la reconstrucción, incluyendo el envío de tropas.

P.: ¿Paraguay que va a hacer? Porque Brasil y la Argentina han hecho pública su negativa al envío de tropas a ese país...

L.R.: Para enviar tropas, Paraguay necesita aprobación parlamentaria. No es algo que vaya a ocurrir ahora. No hay una respuesta todavía. En el Mercosur tratamos de consensuar también la política internacional, en votaciones de cargos o endosando el voto en algunos asuntos, pero cada país también mantiene su autonomía.