Frenético final de la primera etapa. La semana corta no impidió que el dólar volara. Denuncias cruzadas hasta último momento. Un 17 de octubre sin las máximas autoridades. Agotamiento social tras las elecciones. Apareció la vacuna local contra el covid. Perdieron Los Pumas, pero alegró Messi en Perú. Idas y vueltas con el celular de Chocolate. Tiran 100.000 litros de leche. Siguen repatriando rehenes de Israel. Hoy se recuerda la poliomielitis. Muchos quinchos, incluyendo alguno tras el shock de los resultados. Veamos.
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Charlas de quincho
Frenético final de la primera etapa. La semana corta no impidió que el dólar volara. Denuncias cruzadas hasta último momento. Un 17 de octubre sin las máximas autoridades. Agotamiento social tras las elecciones.
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Sergio Massa fue recibido con cánticos y ovaciones en el Ministerio de Economía
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Las cuatro señales claves de Sergio Massa para intentar estabilizar los mercados
Dólares. “Con el swap chino llegamos tranquilos hasta noviembre”, señaló un cercano al ministro Sergio Massa, en alusión al destino que la liberación de la nueva ampliación de esos fondos (otros u$s6.500 millones de libre disponibilidad) que le permitirían ahora al Gobierno afrontar, entre otras cosas, los pagos hasta fin de año. El tema no es menor ya que, según se escuchó días atrás en la Bolsa de Cereales, “si empieza a llover ahora, podría comenzar a entrar algo (de dólares por exportaciones) a partir de mayo”. La afirmación aludía a los adelantos de exportaciones de soja y de maíz, que ya se hicieron y que, normalmente, recién se producen durante el verano; además de la caída en la producción de trigo que, más lo ya anotado del cereal, prácticamente no deja saldo exportable hasta la nueva cosecha de granos gruesos, en abril-mayo del año que viene. Tanto es así que el informe del CAA de ayer indica que durante septiembre “las exportaciones se desaceleraron otro 33,4% respecto al 2022” lo que representó u$s1.330 millones menos que en septiembre del año pasado. La tendencia bajista se mantiene, lo que ya venía siendo monitoreado, por todos los candidatos, ya que al que le toque en diciembre el Sillón de Rivadavia debería enfrentar una coyuntura nada fácil. Por ahora, la primera parte de la ecuación parece empezar a darse, dado que durante el fin de semana comenzaron algunas lluvias más generalizadas, en zonas productivas más extensas, lo que trajo alivio a unos y a otros: a la producción que puede salvar parte de lo que ya invirtió en los cultivos, y a los candidatos que quedan en carrera, porque están más cerca de poder recuperar parte de los u$s22.000 millones que la Argentina perdió por sequía el año pasado. Por supuesto que este era también uno de los puntos de la “tensión” que traía el mercado del dólar cuyo clímax preelectoral se dio el viernes, con distintos récords, en medio de infinitos rumores y accionar de la Policía sobre “cuevas”, financieras, y hasta algún banco sospechado de operaciones “non sanctas”.
Sumas. Por supuesto que la reunión de los exportadores (del Consejo Agroindustrial Argentino -CAA-; y de CERA) fue mucho antes de la sorpresa del domingo, cuando el ministro Sergio Massa dio “el batacazo” ascendiendo al primer puesto, por lo que será quien va al balotaje con el libertario Javier Milei, dejando afuera a Cambiemos con Patricia Bullrich (y Mauricio Macri) a la cabeza. Pero, además de sorpresa, el sector empresarial inmediatamente comenzó a imaginar escenarios y a monitorear los mercados que ayer estuvieron más o menos igual. El caso, como decía uno de ellos, es que “sumando los votos de Milei con los de Cambiemos, lógicamente se impone el libertario, pero la política tiene poco que ver con la matemáticas”, y ya el mismo domingo se comenzaron a perfilar las divisiones, como la de los radicales “celestes”, que no votan LLA (La Libertad Avanza), o los del grupo UCR que ayer temprano sorprendieron a los más madrugadores con volantes en los parabrisas, rezando: “Los radicales no votamos locos, negacionistas, antiderechos, terroristas, o represores. Massa Presidente”, todo en medio de internas casi más sanguinarias que las anteriores, aunque el tablero ya se había dado vuelta totalmente. “Ni siquiera que el domingo fuera 22, ‘el loco’, ni que ese día Javier cumpliera 53 años, le sirvió esta vez”, se quejaba un libertario que aún no podía creer que esa fuerza hubiera perdido la pole position, y menos aún por la “atropellada” del ministro-candidato que en dos meses (desde las PASO hasta el domingo) se cargó con más de 3 millones de votos, mientras que su adversaria Bullrich perdía 430.000 y Milei crecía en apenas 768.000 sufragios.
Leche. Mientras algunos aprovechaban el sábado para algunos encuentros en los que se hablaba de fútbol (el retiro adelantado de Messi); de Los Pumas que perdieron finalmente ante los All Blacks, pero que deberán jugar contra los ingleses el viernes, por el bronce; o de las dos horas que duraron apenas las entradas puestas en venta para la Libertadores, en el Maracaná de Río, en Brasil; otros se abocaban a temas menos agradables, como las larguísimas colas de camiones de combustibles que se registraron desde el viernes a unos 100 km de Buenos Aires, y que algunos estimaban que estaban allí esperando a ayer lunes, tras las alecciones, para llegar recién a destino y hacer las descargas. “¿Con otro precio?”, preguntaban en la mesa, mientras algún industrial llamaba la atención sobre los más de 100.000 litros de leche que debió tirar la cooperativa láctea SanCor ante la imposibilidad de procesar el producto por un nuevo conflicto gremial que lleva años. Según algunos conocedores, eran casi 400.000 los litros que estaban en riesgo. También, algún memorioso recordó que hoy es el Día Mundial de Lucha contra la Poliomielitis, que en Argentina lleva más de 80 años, cuando se creó ALPI para hacer frente a uno de los primeros brotes de la enfermedad. Esto dio lugar a dos de las campañas de vacunación más trascendentes -la del 50 y la del 60-, que luego permitieron la erradicación de la polio finalmente en 1984 y el dato, para nada menor aunque en este escenario casi pasó desapercibido, de la aparición de la primera vacuna argentina contra el covid, la Cecilia Grierson.
Lluvia. En una muy bien decorada terraza en pleno Palermo, una cuarentena de invitados seguía el domingo a la noche las alternativas de la 1ª vuelta electoral y, si bien había muchos de Cambiemos, prácticamente había representantes de casi todos los partidos y sus versiones. El hecho, además, de que se tratara de ex funcionarios; algún juez, varios diplomáticos, hombres de empresa, algunos legisladores y fiscales, también le daba bastante representatividad a la muestra en la que la sorpresa fue el factor dominante. Entre algunas copas y bocadillos se tejían las teorías más rabiosas y conspirativas, incluyendo si habrá o no Extraordinarias, donde las opiniones estaban perfectamente divididas, con posiciones a favor y en contra. Sin embargo, fueron los empresarios los que llamaron a bajar a tierra: “¿Alguno de ustedes sabe quiénes serían los ministros de Economía de cualquiera de los dos candidatos?, ¿o serán ellos sus propios ministros?”. Por supuesto que el silencio fue la única respuesta, aunque era uno de los asuntos más importantes en el corto plazo, por todos los pendientes (muchos atrasados) que tiene el país. El resto de las especulaciones pasaba por la posible evolución de los mercados ayer, lo que ya se había comenzado a ver por las cotizaciones de la trasnoche, del otro lado del mundo. Y, pese a que el “blue” mantuvo su nivel anterior, las plazas en general estuvieron bastante más tranquilas de lo que se esperaba; aunque cayeron las acciones y subió el riesgo- país, pero se frenaron buena parte de los retiros de los bancos, mientras que el Central volvió al ruedo de compras después de varios días. “La lluvia calmó todo”, decían sarcásticos, en la City.
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