- ámbito
- Edición Impresa
Chávez terminó de erradicar al popular canal opositor RCTV

Los trabajadores de RCTV protestaron ayer frente a la sede de la emisora por la decisión del Gobierno de Venezuela de retirar al canal de la grilla de cables (izquierda). Hugo Chávez (derecha) ya la había sacado de la televisión abierta en 2007, lo que supuso entonces un serio perjuicio para empleados, artistas y periodistas.
Radio Caracas Televisión (RCTV) ya había visto caducada su licencia para operar en televisión abierta en 2007 al vencer la concesión respectiva, que el Gobierno de Hugo Chávez se negó a prorrogar, al revés que lo hecho con otras emisoras. De este modo, se consuma su salida definitiva del mapa de medios de Venezuela, restándole ahora sólo la posibilidad de emitir a través de internet.
El viernes y el sábado, RCTV no difundió las apariciones en cadena oficial del presidente Chávez, que todos los medios deben difundir obligatoriamente y que en Venezuela se producen con particular frecuencia.
Cuando RCTV dejó de operar en abierto (era la señal más antigua y de mayor audiencia), comenzó a transmitir por cable y desde su sede en Miami bajo el nombre RCTV Internacional.
Desde diciembre de 2009, se estableció por ley que cualquier canal de televisión por cable sería considerado nacional si un 30% de sus contenidos eran de producción venezolana. El Gobierno consideró que éste era el caso de RCTV, que por tanto está sujeto a las leyes nacionales, comenzando por la difusión de las cadenas oficiales. RCTV considera que, por haber instalado su sede en Miami, ya no es una señal «nacional» y que, por ende, no está obligada a transmitir los discursos de Chávez.
Las operadoras de televisión por cable «deben velar porque los productores nacionales incluidos en su parrilla de programación den cumplimiento inmediato a esta ley.
Las operadoras son las responsables porque no pueden tener canales que no cumplan», explicó el sábado por la noche Diosdado Cabello, director de Conatel, el ente regulador de las comunicaciones.
El funcionario subrayó que a las empresas que no respeten la ley se les abrirá un «proceso administrativo».
Tres horas después, la señal de RCTV fue sacada del aire por estas operadoras.
«No estamos cerrando a nadie», reiteró Cabello el sábado en la noche, sin nombrar directamente a RCTV y dejando a las operadoras de televisión por cable la decisión de retirar o mantener la señal de este medio.
Junto con RCTV fueron sacados del aire también los canales Ritmo Son, Momentum, América TV de Perú, American Network y TV Chile, mucho menos populares en el país, según el presidente de la Cámara Venezolana de Televisión por Suscripción (Cavetesu), Mario Seijas.
Pese a que son notoriamente extranjeras, estas señales fueron calificadas como locales -con las obligaciones que ello implica en cuanto a la adhesión a la cadena nacional- debido a lo que el Gobierno describe como falta de informes sobre su programación y composición accionaria. Sin embargo, señalaron que en los próximos días aquéllas completarán la documentación que sea necesaria para normalizar su situación.
El caso ya generó polémicas en Chile, incluso entre legisladores de la Concertación que exigieron a Michelle Bachelet que proteste ante Caracas.
En el lugar que ocupaban estas señales se podía leer ayer un mensaje de las empresas de suscripción por cable en el que instan a los medios afectados a «dar cumplimiento a la normativa legal vigente» para «restablecer sus servicios».
Tras conocerse la noticia, varios cacelorazos se escucharon en diversas partes de Caracas. Además, un grupo de ciudadanos se congregó a las puertas de la sede de Conatel en la capital.
Calificando esta medida de «ensañamiento» y «zarpazo a la libertad de expresión», el movimiento opositor Mesa de la Unidad condenó ayer la medida y se solidarizó con los trabajadores del canal.
«El gobierno que no puede con la inseguridad, que produce la inflación más alta de América Latina y que no ha sido capaz de gerenciar servicios básicos como la electricidad y el agua, se desahoga cerrando emisoras, negando al pueblo su derecho a informarse y entretenerse con libertad», denunciaron.
Para el diputado Juan José Molina, del partido opositor Podemos, el gobierno quiere que la situación se radicalice para que no se celebren las elecciones parlamentarias de septiembre, en las que el gobierno puede perder su mayoría en la Asamblea Nacional (parlamento).
Molina recordó que esta medida se realizó el 23 de enero, cuando Venezuela estaba celebrando 52 años del fin de la dictadura. «Fue su regalito», ironizó.
En la normativa aprobada en diciembre el Gobierno venezolano consideró televisoras nacionales a RCTV y otros 23 canales que transmitían por cable. Otros 164, como CNN, HBO, la mutiestatal Telesur, que tiene su sede en Caracas, y Venevisión Internacional del empresario venezolano Gustavo Cisneros, siguen considerándose internacionales y están exentos de cumplimiento de las leyes locales.
Agencias AFP, DPA, EFE y Reuters
Dejá tu comentario