Grupos violentos provocaron incidentes en marcha contra la cumbre mundial

Serios disturbios en la zona del Obelisco arrojaron el saldo de vidrieras rotas, contenedores incendiados y varios detenidos. El despliegue de efectivos de Gendarmería y de la Policía Federal no alcanzó para evitar el caos generado por sectores minoritarios tras la movilización.

Reclamo empañado. Grupos minúsculos de violentos e inadaptados le pusieron un broche lamentable a la marcha en la que partidos de izquierda y organizaciones sociales expresaban su repudio a la cumbre de la OMC.

Otra vez la violencia opacó una manifestación convocada por sectores que expresaron su rechazo a la cumbre de la Organización Mundial de Comercio (OMC) que se desarrolla en Buenos Aires. Un grupo minoritario de inadaptados provocó serios disturbios en la zona del Obelisco, donde rompieron vidrieras e incendiaron contenedores. El accionar delictivo -que contrastó con el carácter pacífico de la convocatoria- se inició hacia el final de la manifestación, que partió del Congreso hacia Corrientes y 9 de Julio, cuando algunas personas comenzaron a lanzar piedras y botellas contra algunos móviles de exteriores pertenecientes a los canales de noticias que cubrían la marcha y las vidrieras de los negocios céntricos.

La seguridad en la zona fue reforzada con personal de Gendarmería y la Policía Federal que tras los incidentes, detuvieron al menos a tres individuos, a quienes se los vinculó con los incidentes. El damero de agrupaciones que convocaron al reclamo fue amplio: había integrantes del Frente de Izquierda, Izquierda al Frente, el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y el MTD Aníbal Verón. Además de las consignas anti-globalización, las organizaciones convocantes expresaron su rechazo a las reformas impulsadas por el Gobierno, entre ellas la previsional y la laboral.

La 11º Conferencia Ministerial de la OMC se desarrolla desde el domingo en Buenos Aires bajo un estricto operativo de seguridad en la zona de Puerto Madero y el microcentro, con restricciones para el acceso de vehículos y peatones.

El pasado domingo, cuando se inauguró la cumbre, organizaciones sociales como Barrios de Pie, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y la Corriente Clasista Combativa (CCC) se habían movilizado junto a la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) al Obelisco para repudiar la llegada de los representantes económicos.

Nuevo comando

Ayer el Ministerio de Seguridad oficializó la creación de un "Comando Unificado de Seguridad OMC" para gestionar la coordinación de fuerzas del operativo de seguridad montado para las actividades y eventos de la cumbre que se inició el domingo y culminará este jueves. Así se desprende de la Resolución 1332-E/2017, que fue publicada en el Boletín Oficial de este martes con la firma de Patricia Bullrich.

En los considerandos de la medida, la cartera explicó que el objetivo es "permitir una mejor organización y optimización de los recursos humanos y materiales existentes en relación a la seguridad y organización" del evento.

"Tratándose de un evento de gran envergadura y de carácter interjurisdiccional corresponde convocar a organismos y cuerpos policiales locales a fin de aunar esfuerzos en pos de la seguridad de los habitantes y de los asistentes a la Conferencia", justificaron.

El Comando está conformado por personal de la Secretaría de Seguridad del Ministerio, Policía Federal Argentina, Gendarmería Nacional, Prefectura Naval Argentina, Policía de Seguridad Aeroportuaria y por representantes de los cuerpos policiales de la Ciudad y Provincia de Buenos Aires.

La coordinación está a cargo del Comisario Mayor Héctor Pedro Carlos Cajida, "quien tendrá a su cargo la conducción de los cuerpos policiales y fuerzas de seguridad afectados al operativo, pudiendo delegar dicha función en la persona que el designe".

El Gobierno sabe que debe dar respuesta a los requerimientos que exigen los dispositivos de seguridad de los representantes políticos y económicos presentes en el coloquio empresarial y, a la vez, provocar la menor cantidad de inconvenientes a los habitantes de una ciudad de Buenos Aires sumamente fastidiados por el enorme despliegue de efectivos y la gran cantidad de calles y avenidas con restricciones vehiculares y peatonales.