15 de marzo 2018 - 00:00

Igual que en la Guerra Fría: May expulsó a 23 diplomáticos rusos por el ataque al exespía

Se trata de la mayor crisis entre ambos países en 30 años. La OTAN y La Unión Europea respaldaron al Reino Unido, que lleva el caso a la ONU.

DECIDIDA. La primera ministra Theresa May respondió con sanciones diplomáticas al silencio de Rusia. La investigación sigue su curso.
DECIDIDA. La primera ministra Theresa May respondió con sanciones diplomáticas al silencio de Rusia. La investigación sigue su curso.
Londres y Moscú - El Gobierno británico expulsará a 23 diplomáticos rusos por el atentado con un agente nervioso perpetrado en este país contra el ex espía doble ruso Serguei Skripal y su hija, entre otras sanciones de alto impacto, informó ayer la primera ministra británica, Theresa May.

Los diplomáticos fueron "identificados como oficiales de inteligencia no declarados" y tendrán una semana para abandonar el país, explicó la mandataria ante el Parlamento. "Esta será la mayor expulsión en más de 30 años y refleja el hecho de que no es la primera vez que el Estado ruso actúa contra nuestro país", dijo May, citando el envenenamiento en Reino Unido del exespía ruso Alexander Litvinenko en 2006. El agente murió tras beber té contaminado con isótopos radiactivos y una investigación determinó que fue asesinado por agentes que respondían al Kremlin.

Además, May anunció que se congelan los contactos bilaterales de alto nivel con Rusia. Por eso, se cancela la invitación al ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, para una visita al Reino Unido y ningún funcionario o miembro de la familia real asistirá al Mundial de Fútbol que se disputará este año en Rusia. Además, Londres intensificará los controles a aviones privados, aduana y tráfico de carga.

El Gobierno pidió también una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para "informar a los miembros sobre la investigación del ataque con agente nervioso en Salisbury", tuiteó la Cancillería .

El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, está "profundamente preocupado" por el caso, dijo su portavoz. Guterres "condena fuertemente el uso de agentes nerviosos o armas químicas y espera que el incidente sea investigado minuciosamente", expresó el vocero Farhan Haq.

El Gobierno británico considera que lo más probable es que el Estado ruso sea el responsable del envenenamiento de Skripal, de 66 años, y su hija Yulia, de 33, que luchan por su vida en un hospital tras ser encontrados inconscientes el 4 de marzo en Salisbury.

Rusia, en tanto, prometió prontas represalias contra el Reino Unido por las expulsiones, condenando la medida británica como "una cruda provocación sin precedentes", llevada a cabo "bajo un falso pretexto".

Las acciones británicas están "destruyendo los fundamentos del diálogo intergubernamental normal entre nuestros países", aseveró la Cancillería en una declaración.

La Embajada de Rusia en Londres también condenó la decisión de expulsar a los 23 diplomáticos y calificó la medida como una "acción hostil" que es "totalmente inaceptable, injustificada y miope".

La sede diplomática afirmó en un comunicado difundido en su página web que "toda la responsabilidad recae en los actuales líderes políticos de Reino Unido".

Londres dio el lunes un ultimátum de 24 horas a Moscú para que revelara "de forma inmediata a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) los detalles del programa Novichok", nombre de la sustancia tóxica empleada. Dicha sustancia se desarrolló en la Unión Soviética y es uno de los agentes nerviosos más peligrosos. Horas antes, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, había advertido que Rusia no atendía a ultimátums y aseguró que se había comunicado al Reino Unido por canales diplomáticos que Rusia no tiene nada que ver con el ataque.

Por su parte, la Unión Europea (UE) y la OTAN dieron su apoyo al Reino Unido en el caso. El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, expresó su "total solidaridad" con May "a la vista del brutal ataque que fue inspirado por Moscú".

Agencias DPA y Reuters,

y Ámbito Financiero

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