Jefe de Gobierno terció para colocar a su candidata al frente del órgano de selección de jueces. Mar de fondo en el Colegio Público de Abogados.
Plenario. Ayer se eligieron las autoridades con la nueva distribución de poder.
El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta logró imponer en la presidencia del Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires a la abogada Marcela Basterra, candidata del oficialismo que saltó del sillón de vice del organismo de selección y remoción de jueces para reemplazar al fallecido Enzo Pagani, hombre de confianza de Daniel "Tano" Angelici y del riñón PRO. Pero la elección de autoridades en el Consejo también desnudó -como trasfondo- una pelea de alto impacto político en la conducción del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal (CPACF). La ruptura entre Angelici y el actual presidente del CPACF por la agrupación Gente de Derecho, Jorge Rizzo devela una guerra, cuyo objetivo principal será si el macrismo, el año próximo, puede hacerse del mando del órgano oficial que agrupa letrados de la matrícula, un preciado bastión de poder por el plus que significa también su banca en el Consejo de la Nación.
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El reparto de los cargos y la distribución de comisiones en el Consejo local no ofreció sorpresas y marcó continuidades. Como vice, escaló Alejandro Fernández, también oficialista (por el sector de Cristian Ritondo) pero en representación de la Legislatura. Basterra completará el mandato de Pagani, con intensas negociaciones por la intención de Angelici de colocar en ese lugar a partir de 2019 a Silvia Bianco, última en incorporarse al pleno en la vacante generada, y esposa de Juan Sebastián De Stéfano, a cargo de la estratégica dirección de Asuntos Jurídicos de la Agencia Federal de Inteligencia. Pese a que Bianco había sonado como postulante seria a la presidencia, la puja quedó definida a favor de la candidata con mayores pergaminos y con la venia de Rodríguez Larreta con un ojo puesto en el traspaso de la justicia nacional a la órbita porteña. La Comisión de Administración, Gestión y Modernización Judicial quedó a favor del abogado Juan Pablo Godoy Vélez, mientras que la de Disciplina y Acusación fue para otra de las representantes de la política, Vanesa Ferrazzuolo. La asunción de Basterra liberó espacios para que peronista Juan Manuel Olmos también expandiera su núcleo de influencia a través de Godoy Vélez que ingresó por su estamento a la comisión disciplinaria para hacer tándem con Ferrazzuolo. El tercer abogado es Javier Roncero del radicalismo versión Martín Lousteau, mientras que Basterra no podrá integrar comisiones mientras esté en la titularidad del Consejo. El cargo no es menor si se espera el avance (lento) del traspaso del fuero ordinario a la Ciudad, resistido por los jueces pero con aval de la Corte Suprema para que se termine concretando.
El plenario del Consejo de la Magistratura está compuesto por nueve miembros: tres en representación del estamento de los jueces, tres por los abogados y tres en representación de la Legislatura. El angelicismo a través de Bianco se quedó con la Comisión de Fortalecimiento Institucional e hizo pie en el Foro Federal de Consejos de la Magistratura y Jurados de Enjuiciamiento (Fofecma), órgano que aglutina a todos los consejos a nivel país y para cuya titularidad había sido elegido Pagani al momento de fallecer sorpresivamente. En Selección, quedó a cargo el juez, Marcelo Vázquez.
El estallido al interior del CPACF planteará la escisión entre el PRO y Gente de Derecho que aspiran a confrontar en guerra abierta entre Rizzo y Angelici, donde los principales exponentes porteños han debido tomar posición de un lado u otro de la grieta.
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