Lula se fue de China con u$s 15.000 M

Lula y su par chino, Hu Jintao, se vieron el martes. Ayer, el brasileño dejó China rumbo a Turquía.

Pekín - El presidente Luiz Inácio Lula da Silva partió ayer de China rumbo a Turquía, tras una visita de tres días en la cual firmó 13 acuerdos, incluyendo un préstamo chino para la petrolera estatal Petrobras. Sin lugar a dudas, un cuento chino distinto del promocionado por el entonces Gobierno de Néstor Kirchner, porque en el caso brasileño las promesas de cooperación se tradujeron en más de u$s 15.000 millones de inversiones y financiamientos. Comprende un préstamo a Petrobras por u$s 10.000 millones, otros u$s 800 millones para el Banco Nacional de Desarrollo, más u$s 100 millones para el banco Itaú BBA, y u$s 4.000 millones que invertirá la minera y siderúrgica Wuhan Iron & Steel en la brasileña MMX del grupo Eike Batista (construirán una acería en Río de Janeiro de 5 millones de toneladas anuales).

Vale recordar, a la hora de evaluar cada cuento, que tanto la Argentina como Brasil entregaron como prenda de amor el reconocimiento de economía de mercado a China, lo cual le abrió las puertas de ambos mercados sudamericanos sin restricciones.

Sin embargo, a la vista de los periodistas brasileños, Lula se vuelve de China con las manos vacías. Por supuesto, Lula no concordó con esa lectura y destacó a la prensa que lo acompaña que China ya es el principal socio comercial de Brasil.

Dejó entrever que el país tiene que invertir fuerte en esta relación porque hay 1.000 millones de personas queriendo comer pollo, carne, comprar heladeras, y su país puede participar de ese crecimiento chino. Ponderó que el principal acuerdo comercial celebrado, que involucra la exportación de carnes de aves, es un triunfo del Gobierno brasileño.

El otro gran ganador de la visita de Lula a China fue Petrobras, que el martes firmó con el China Development Bank un acuerdo de financiación bilateral por u$s 10.000 millones por 10 años, principalmente para explorar los megayacimientos submarinos de la Cuenca de Santos. El préstamo se aplicará a la financiación de las inversiones de Petrobras, incluso la adquisición de productos y servicios de empresas chinas. El acuerdo también incluye un incremento del volumen actual de exportación de petróleo de Brasil a China. Pero la negociación fue más allá porque se acordó un programa de exportación de largo plazo entre Petrobras y UNIPEC Asia, subsidiaria de Sinopec, que comprende la venta de 150.000 barriles diarios de crudo el primer año y 200.000 barriles a lo largo de los 9 años siguientes.

Lula describió la etapa china de su gira como «una de las más importantes» de su gestión presidencial, iniciada en 2003, en momentos en que la crisis económica puso en evidencia la importancia creciente de los grandes países emergentes.