Elisa Carrió consideró “gracioso” que los acusados por el intento de asesinato contra la vicepresidenta sean vendedores ambulantes de copos de azúcar, pero valoró que “gracias a Dios no pasó nada”.
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Para Carrió, es gracioso banda de los “copos”
“Que haya una banda de vendedores de copos de azúcar es muy gracioso”, dijo Carrió, y añadió que, a partir de estos dichos, “ahora viene el ‘gordicidio’ (sic), que es la muerte de una gorda”. La dirigente se expresó en declaraciones a la prensa que realizó en la ciudad de Paraná al ingresar a la sede de la Gobernación para reunirse con el mandatario correntino, Gustavo Valdés. Allí, al referirse al intento de magnicidio valoró que “ya pasó” y que “gracias a Dios no pasó nada”.
“El hecho existió; ahora, que haya una banda de vendedores de copos de azúcar es muy gracioso, porque si me atacan a mí, me matan por diabética, porque yo hubiera comprado los copos”, dijo la exdiputada y que “es un país de papel, se dan cuenta, (…) una banda que vende copos de azúcar”.
“Ya pasó, gracias a Dios no pasó nada, la expresidenta estaba en indefensión, ya pasó”, remarcó Carrió y siguió en broma: “Ahora viene el ‘gordicidio’, que es la muerte de una gorda”.
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