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Pujan en Perú por el indulto a Fujimori
Ayer, de visita en Montevideo, Humala bajó las expectativas que él mismo había generado al abrir la puerta a un indulto en declaraciones formuladas a la CNN el viernes previo a su triunfo electoral, el 5 de junio, y ratificadas el domingo en entrevista con el diario El Comercio. El líder de Gana Perú llegará hoy a la Argentina para reunirse con Cristina de Kirchner. Sus voceros anunciaron que viajará en Buquebus, debido a las suspensiones de vuelos por la ceniza volcánica.
En tanto, familia y abogados del expresidente conservador (1990-2000) esperan una resolución del Tribunal Constitucional peruano sobre una demanda en contra del proceso legal por el que fue condenado.
Al hablar de indulto, Humala arriesga el enojo de aliados políticos y su base electoral. Su electo vicepresidente y exprocurador anticorrupción, Omar Chehade, propuso el 6 de junio trasladar a Fujimori a una cárcel común desde las instalaciones donde purga su condena, un minidepartamento en la sede de la Dirección de Fuerzas Especiales de la Policía Nacional, en Ate, periferia de Lima.
«Estamos sumamente preocupados, se trataría de un manejo político y sería vergonzoso para el Perú y para todo el sistema latinoamericano de derechos humanos un indulto», dijo Rocío Silva Santisteban, directora de la Coordinadora Nacional de DD.HH. «Una medida de ese tipo en estas circunstancias previas al cambio de Gobierno sería sembrar una bomba de tiempo para el nuevo Gobierno», enfatizó.
La jefa del consejo de ministros y ministra de Justicia, Rosario Fernández, dijo ayer que el Gobierno del presidente Alan García, que culminará el 28 de julio, no lo indultará, con lo cual derrumbó los rumores en ese sentido. Por su parte, el fiscal de la Nación, José Peláez Bardales, opinó que un indulto a Fujimori, de 72 años, en caso de enfermedad terminal, tendría que estar debidamente justificado por un informe médico. Si bien Peláez había dicho que la Corte Interamericana de Derechos Humanos y el Tribunal Constitucional prohíben esa gracia presidencial en casos de delitos de lesa humanidad, ayer expresó que se puede otorgar en caso de enfermedad terminal.
«Allí sí procede el indulto humanitario», afirmó Peláez, el fiscal titular de la denuncia del Ministerio Público en el juicio contra el exmandatario que concluyó en su condena por violaciones a los derechos humanos y corrupción, en 2009.
Fujimori, quien fue destituido cuatro meses después de haber asumido un tercer mandato consecutivo por incapacidad moral para gobernar, se encuentra internado desde la semana pasada en el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas, donde fue trasladado para ser sometido a exámenes para determinar las causas de su pérdida de peso, de unos 15 kilos. Dirigentes fujimoristas reclaman un perdón urgente.
Agencias ANSA y AFP
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