27 de julio 2021 - 07:21

Efecto "Ozono Merval": cinco recomendaciones para evitar engaños en la inversión de criptomonedas

Ante la disyuntiva de acceder al mercado por el miedo a que el intermediario desaparezca y los criptoactivos se pierdan, para evitarlo es necesario tener en cuenta una serie de pasos.

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En los últimos días se conoció un caso en el que un twittero argentino con miles de seguidores y 200 suscriptores en el servicio de alertas en WhatsApp ofrecía trading, al presentarse como un profesional de trayectoria superior a 28 años dentro del mercado financiero.

El escándalo comenzó cuando los usuarios que invertían en criptomonedas, lo acusaron de perder gran parte de un Fondo Común de Inversión propio que reunía casi u$s70.000. En este sentido, el análisis técnico no funcionó y llevó a la gente a denunciarlo como una supuesta "estafa".

Si bien el titular de la cuenta @Ozono_Merval, quien desplegó su cartera de clientes en Binance, desactivó su perfil para “recuperar el monto perdido" con los u$s10.000 que le quedaron al FCI "casero", este escenario incluye uno de los miedos más comunes al invertir en activos de riesgo: que el intermediario desaparezca y que el número tradeado se pierda.

Juan Ignacio Bob Lehmann, trader especialista en criptomonedas, aseguró que los fraudes tienden a surgir, entre otras maneras, cuando los contrapartistas no comprenden el poder sistemático: “Hay gente que se aprovecha de los pocos conocimientos y de la poca educación financiera que hay alrededor del mundo, en especial en Argentina”.

Llevado al caso, lo que falló fue la gestión de riesgo. “Una de las fotos muestra que operó con u$s25.000 de margen, cuando en la cuenta se estima que tuvo u$s70.000. Esto representaría casi el 30% que si te sale mal, lo terminas perdiendo”, dijo y agregó: “Uno no puede tradear eso cuando lo recomendado es no usar más de un 5% del total por operación, lo cual se considera una estrategia agresiva”.

“Acá no hay un aspecto legal”, enfatizó al comentar que las personas que participaron lo hicieron dentro de un mercado desregulado y descentralizado. De hecho, la falta de un ente que respalde lo que pueda ocurrir impone que las reglas del juego sean otras.

Mientras el norteamericano está regulado por Securities and Exchange Commission (SEC) y el nacional por la Comisión Nacional de Valores (CNV), el mundo de las monedas digitales se diferencia por ser un libre mercado respaldado por la tecnología blockchain.

Bitcoin, Ethereum, Ripple, Litecoin y NEO son algunos de los ejemplos que integran el prometedor e innovador sistema que comenzó hace doce años. “En base a la volatilidad, la ganancia y la pérdida pueden ser muy grandes. Si bien la exposición a la hora de invertir es superior a cualquier otra, se podría lograr una rentabilidad y un retorno mayor”, aclaró Juan Ignacio, también investigador en FinLab UADE.

En la actualidad, los reclamantes piden que el organizador les devuelva, al menos, una parte de la pérdida. Sin embargo, al no desarrollarse en Bolsas, el servicio de especulación criptográfica no estipula este tipo de derechos.

Para evitar caer en engaños y en la desconfianza de una inversión digital, según el trader, existen cinco recomendaciones:

  • Conocer el mercado

Es necesario estar informado y estudiar sobre el mercado en el que se desplegará la operación. Así como también es fundamental entender de qué se trata, qué se negocia, cómo se hace y mediante qué formas.

Se recomienda tomar cursos de capacitación y leer libros que profundicen el tema como “El poder de los mercados” de Roberto Ruarte, que comprende la capacidad de anticipar ciertos sucesos económicos.

  • Capacitarse en trading y operaciones

Al conocer cómo funciona, se puede dar cuenta de una posible estafa. En la balanza, no es lo mismo una persona de nulo conocimiento que una que al menos estudió la teoría.

En este caso, se debe tener en cuenta el análisis técnico y la psicología del trading. “Análisis técnico de los mercados financieros” de John J. Murphy y “El nuevo vivir del trading” de Alexander Elder, son algunos de los textos para formarse.

  • Conocer a la persona con la que invertís

Hay que contar con un mínimo de información sobre la persona a la cual le otorgas el dinero, por lo que no hay que dársela a un desconocido.

Además se aconseja reunirse de manera virtual y presencial, para conocer en detalle las estrategias del intermediario.

  • Solicitar indicios de operación y actividad al fondo

El fondo o la persona a cargo de invertir deberá mostrar las operaciones que realiza, en especial para prevenir sospechas de fraude y para obtener actualizaciones sobre cómo se desempeña el fondo.

  • Contar con un escrito detallado sobre costos, riesgos, profesionalidad y plan de inversión

Se tiene que especificar de manera tal que sea un contrato entre ambas partes, incluyendo hasta el más mínimo detalle que respete el perfil del inversor. Se debe comprender que las estipulaciones dentro del plan no siempre serán los retornos finales, por el simple motivo de que no es posible visualizar los rendimientos futuros.

Julieta Caminetsky, economista, agregó: “Las criptomonedas no son buenas o malas en sí mismas, y su principal característica no es la vulnerabilidad en la ciberestafa”.

Si bien cualquiera puede ser víctima de un ataque económico, el conocimiento permite sacarles el máximo provecho a los activos digitales. En esta línea, Caminetsky, también fundadora de Finanzas Fem, destacó la importancia de escuchar distintas voces para poder generar un criterio personal y no depender de nadie a la hora de tomar decisiones estratégicas.

“Se puede solicitar asesoramiento a personas idóneas que estén asociadas a agentes de bolsa, brokers o independientes, pero siempre entendiendo dónde se está invirtiendo”, aclaró y sugirió realizar interconsultas, tomar referencias sobre productos financieros y no delegar responsabilidades ni soberanía sobre la plata.

En base a la creencia de que hay una manera de hacer plata rápido y fácil, se debe trabajar en el consumo compulsivo patológico y la ambición desmedida que tiende a convertir en vulnerables y sujetos de estafas a los especuladores.

En tanto cabe destacar que para ser trader no hace falta ser economista, licenciado en finanzas o en ciencias económicas. Muchos optan por comprar y vender activos en cualquier mercado financiero con el objetivo de potenciar ahorros o vivir de esto.

Manejar un FCI, en cambio, requiere de gran experiencia y manejo del riesgo profesional. Sin una gestión acorde, pese a las posibles altas y bajas, el manejo a largo plazo no será rentable. Además requiere de una barrera de acceso psicológica muy importante.

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