El narcotráfico sigue sembrando el miedo en la ciudad de Rosario a través de amenazas de bombas en diferentes sedes gubernamentales y policiales. Además se registró el ataque a la oficina del titular de Asuntos Penitenciarios, donde un grupo que responde a la banda de Los Monos, baleó el edificio como advertencia.
Rosario: tras la detención del hijo del líder de Los Monos, refuerzan la seguridad en sedes gubernamentales y policiales
Durante el fin de semana, se registraron amenazas de bomba en diferentes edificios oficiales. Además balearon la casa del titular de Asuntos Penitenciarios.
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La ola de amenazas y ataques ocurrieron luego de que la Justicia detuviera a Uriel Luciano Cantero, hijo del asesinado líder de Los Monos.
Hoy se registró un llamado al 911 que desencadenó un operativo de la brigada de Explosivos en la sede de la Agencia de Control Policial, en Rosario.
Además se reforzó la seguridad preventiva de distintas dependencias policiales, como la Jefatura Central, donde hay guardia estricta en la puerta con efectivos con chalecos antibala, revisando cada vehículo que ingresa al lugar.
Las amenazas del cartel de Los Monos
El jueves pasado comenzaron las advertencias, cuando apareció una nota hecha en un pedazo de cartón, donde una amenaza escrita apuntaba al jefe de los guardiacárceles.
“Si siguen verdugueando a la familia de los alto perfil, para la próxima vamos contra las familias de los empleados del servicio. El que avisa no traiciona”, decía el aviso.
Luego fue Lorena Verdún, la madre de Luciano Cantero, nuevo líder de Los Monos, quien lanzó una intimidación contra el fiscal Matías Edery, en el medio de una audiencia: “Esto no va a quedar así”.
En el operativo de detención del hijo de Cantero, se le secuestraron 25 pistolas, cargadores y más de 500 balas.
Las amenazas pasaron a hechos concretos, cuando anoche se registró un ataque con balas contra la sede de Asuntos Internos del Servicio Penitenciario de Santa Fe, en Rosario.
El traslado Luciano Cantero, el hijo del Pájaro, a otra sede penitenciaria despertó las alarmas, cuando los agentes descubrieron que llevaba consigo un teléfono celular.
De todos modos, en la ciudad de Rosario el miedo y la tensión crecen día tras día, ya que la ola de amenazas tiene en vilo a las fuerzas de seguridad y a la población.
El gobierno de Santa Fe dijo que le dará todas las garantías al fiscal Edery para que siga con el desempeño de su función en la Unidad de Criminalidad Organizada, que encabeza junto con Luis Schiappa Pietra.
Estos dos investigadores tienen desde hace tiempo una fuerte custodia por el riesgo y las amenazas que enfrentan en su labor en el Ministerio Público de la Acusación.
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