21 de julio 2008 - 00:00

La justicia portuguesa cerró el caso Madeleine

Madeleine McCann desapareció en mayo de 2007 en un complejo turístico de Portugal.
Madeleine McCann desapareció en mayo de 2007 en un complejo turístico de Portugal.
La Fiscalía General portuguesa anunció que archivó la causa sobre la desaparición de la niña británica Madeleine McCann, vista por última vez la noche del 3 de mayo de 2007 en el sur de Portugal.

El fiscal general luso, Fernando Jose Pinto Monteiro, instruyó a la Policía de su país para detener la investigación.

También confirmó que se les retirara el estatus de sospechosos formales a los padres de la niña, los médicos Kate y Gerry McCann, como también al inglés Robert Murat.

Madeleine, con residencia en el condado de Leicestershire, en el centro de Inglaterra, desapareció la noche del 3 de mayo de 2007 de su habitación del Hotel Ocean Club de Praia da Luz, en la región del Algarve portugués.

La prensa lusa había informado la semana pasada que la investigación de 14 meses quedaría cerrada por falta de evidencia.

Los detectives del caso entregaron a principios de julio su reporte final a la Fiscalía General, que hoy decidió cerrar el caso.

Sin embargo, Kate y Gerry McCann dijeron que no se darán por vencidos y que seguirán buscando a su hija a través de un equipo de detectives privados.

"Lo más importante es que Maddie aparezca con vida", declaró el portavoz oficial de la familia, Clarence Mitchell.

La semana pasada, Murat recibió 1,2 millones de dólares y una disculpa pública tras una demanda por libelo contra once tabloide británicos que publicaron versiones sobre su culpabilidad en el caso.

Tanto los McCanns como Murat niegan categóricamente cualquier vínculo con la desaparición de Madeleine.

Por su parte, el ex jefe de la investigación policial, el portugués Goncalo Amaral, declaró hoy a la BBC de Londres que cree que la niña está muerta.

"La evidencia que logramos juntar hasta el momento que me fui apuntaba a que la niña estaba muerta, y que había muerto dentro del apartamento", dijo Amaral, separado del caso en octubre pasado por haber criticado a la policía británica y que esta semana publicó un libro sobre Maddie.

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