Especial euforia ayer en el regreso de Menem al país
«No vengo a pasar facturas ni a pelear, sino a reconciliar», les confesó Carlos Menem a sus abogados mientras volaban hacia La Rioja, adonde el ex presidente arribó 30 minutos antes del horario anunciado. Admitió ante ellos que no había podido dormir la noche anterior; se lo veía emotivo. El mensaje de Menem ante el público fue claramente opositor: criticó la devaluación y la pesificación; también el transversalismo y, en cambio, abogó por el ingreso de la Argentina en el ALCA. Las medidas de seguridad se vieron desbordadas cuando el Cessna Citation que lo condujo aterrizó. El cálculo de asistentes osciló entre 11.000 y 20.000 personas, según los más optimistas. Una caravana de más de 400 vehículos lo transportó lentamente hacia la ciudad capital de La Rioja, donde frente a la sede del PJ local se había levantado una tribuna. Fue notable la presencia de riojanos, pero lo fue más aún la de arribados desde otras provincias, como Córdoba.
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Carlos Menem llegó ayer a La Rioja media hora antes de lo anunciado y no obstante las medidas de seguridad, la gente desbordó todo. En el aeropuerto lo aguardaba su hija Zulemita, que lo acompañó con la alegre caravana de 400 autos.
Menem habló ante una cantidad de simpatizantes que era difícil de calcular. Los más optimistascontaban hasta 20 mil; una estimación más moderada hablaba de más de 11 mil asistentes para escuchar el ex presidente, que aparecía en el palco junto a la ministra Alejandra Oviedo y al senador Eduardo Menem, que lo antecedieron en el uso del micrófono. Varios canales de TV cable transmitieron los discursos del ex presidente, de su hermano Eduardo Menem y de la ministra Alejandra Oviedo en una virtual cadena.
• Los profetas del odio han destruido esa misma Argentina que construimos de 1989 a 1999, que fue la más brillnate década de todos los tiempos de nuestra patria. Es lo que tenemos que hacer, defender esos 10 años y medio de gobierno brillante. No podemos quedarnos callados ante tanta infamia y difamación.
• Si hablamos de política internacional, ¿qué pueden haber aportado los que nos sucedieron desde 1999? Nosotros conseguimosestar a la altura de los grandes países de la Tierra. Por eso fuimos requeridos a muchos lugares por una creación que algunos han olvidado, como los Cascos Blancos. Con esa y otras creaciones nos colocamos en el puesto 13 entre los países del mundo según una encuesta de las Naciones Unidas.Ahora estamos en el número 40.
• Hablan de lo mucho que recaudan, ¿cómo no van a recaudar si no le pagan a nadie? Y con impuestos que le han quitado al trabajador su salario, su sueldo. Fíjense que el salario actual de los trabajadores es el más bajo de los últimos 50 años en la Argentina. ¿Qué me viene a hablar de un gobierno justo el que tenemos ahora? Es un gobierno que les ha sacado a los que más necesitan. Eso no se arregla con 150 pesos de limosna. Lo que quiere nuestro pueblo es trabajar, vivir con dignidad. Basta de clientelismo. ¿Cómo lo hacen? Contrariamente a lo que es el justicialismo. El clientelismo hace referencia a otras doctrinas. Es igualar para abajo porque con más pobres van a tener más votos. Los justicialistas queremos igualar hacia arriba para que la gente pueda cambiar su casa, su auto, sus electrodomésticos, que vuelva el crédito, se termine la usura.
• ¿Adónde están esos dólares que estaban en los bancos, cuando circulaban los dólares a la par del peso. Lo que hicieron con la devaluación y la pesificación asimétrica es mandar a la pobreza a los Argentinos.
• Yo no puedo terminar mi mensaje sin antes agradecer al pueblo chileno que en otras épocas recibió a Sarmiento, Alberdi, a Laprida, al Chacho Peñaloza, que me dio la oportunidad de vivir en paz y tranquilidad. Encuentro razón a lo que decía Perón. No nos podemos pelear con los chilenos por unos peñascos. Perón hablaba del ABC, y se hizo realidad en nuestra gestión con el Mercosur. Pero falta, tenemos que integrarnos en el ALCA en todo el continente. Pero en alta política internacional, peor: veo que los que nos están gobernando no entienden un pito a la vela (risas).
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