Talibanes amenazan con matar al ex rey

Kabul e Islamabad (EFE, AFP, ANSA) - «No te equivoques, la gente te perseguirá y te matará.» Con estas palabras el gobierno afgano le advirtió al ex rey en el exilio Zahir Shah que no regrese, quien llegó a un acuerdo con la coalición opositora Alianza del Norte para volver al poder si logran derrotar a los talibanes.

Mientras el mullah Mohamed Omar lanzaba esta advertencia, en la ciudad paquistaní de Quetta se organizó una manifestación que congregó a 50.000 personas en apoyo a los talibanes. Esta masiva demostración dio cuenta de los importantes sectores paquistaníes, entre lo que se incluye a facciones del ejército, que disienten con la posición adoptada por el presidente militar Pervez Musharraf, quien alineó a su gobierno con la postura estadounidense y desactivó los fluidos lazos que tenía con el gobierno de Omar antes del 11 de setiembre cuando ocurrieron los atentados.

La manifestación, convocada por los partidos islamistas paquistaníes, había sido desautorizada por el gobierno y se les había ordenado a los periodistas que permanecieran en los hoteles, aunque sus repercusiones se hicieron sentir en toda la ciudad.

Por su parte, trascendió que el multimillonario Osama bin Laden estaría escondido en una zona casi inaccesible de Pamir, el «Techo del Mundo», en donde la Unión Soviética había desarrollado una base nuclear, según indicó el diario paquistaní «The News».

Refugio

Pamir tiene decenas de miles de kilómetros cuadrados de altísimas cumbres, algunas de las cuales superan los 7.000 metros y en donde Bin Laden habría construido un refugio, entre los montes Lenin, Comunismo y Revolución, nombres heredados de la ocupación soviética.

El gobierno talibán insistió además en la demanda, a esta altura retórica, de que los Estados Unidos le presente pruebas en contra del Bin Laden y que se abra una instancia negociadora.

Omar indicó que si un régimen «títere» de los EE.UU. reemplaza a la milicia islamista que dirige, los talibanes se recluirán en las montañas, combatirán y no dejarán a Zahir gobernar en paz. El ex rey, de 86 años, fue derrotado en 1973 y partió entonces hacia Roma, en donde vive actualmente.

El discurso al país fue seguido por una multitudinaria manifestación en Kandahar, la ciudad bastión de los talibanes en el sur de Afganistán. Según la agencia de noticias «AIP», unas 10.000 personas discurrieron por las calles de Kandahar en el acto más multitudinario desde que los Estados Unidos acusaran al régimen de ser cómplice de los terroristas.

Durante el acto, los manifestantes quemaron una bandera estadounidense y apoyaron una resolución que indica que no entregarán a Bin Laden.

En tanto, la Alianza del Norte prepara una gran ofensiva para conquistar Kabul, para lo que ordenó reclutamientos masivos a la espera del apoyo aéreo estadounidense y de las armas prometidas por Rusia.

La guerrilla opositora cuenta con armamento provisto por países como Irán y otros limítrofes, pero éste es precario en comparación con las armas de los talibanes que fueron provistas por Pakistán hasta fechas recientes.