Logran leche sin grasa al cambiar alimento en vacas

El logro se llevó a cabo ensayando una alimentación especial
para las vacas, basada en la ingesta de granos y aceite
de girasol.
La alimentación especial de los animales consistió puntualmente en una suplementación sumada a las habituales pasturas, integrada por granos de girasol y aceite de girasol solos o combinados con aceite de pescado.
«Esto permitió reducir la concentración grasa total de la leche y la fracción hipercolesterolémica de ésta», detallaron los investigadores en su informe.
Los AG son los eslabones que conforman las grasas que a diario consume una persona y pueden ser beneficiosos para el cuerpo, tales como el denominado linoleico conjugado (CLA) o los del grupo Omega 3, característicos por otorgar una protección a la función cardiovascular y con efectos anticancerosos.
Pero también existen los AG perjudiciales o contraindicados, como los ácidos láurico (C12), mirístico (C14) y palmítico (C16), que incrementan el colesterol total y el malo (LDL) cuando son consumidos en exceso.
El INTA explicó que con la alimentación especial que se les dio a las vacas consiguió que «la proporción de los ácidos láurico, mirístico y palmítico de la leche se redujera en 63%, 51% y 29%, respectivamente».
«Además, se logró un aumento promedio de 144% en el contenido de los diversos tipos de CLA», añade el documento de ese instituto nacional.
La investigación de los expertos también analizó si la propiedad obtenida en la leche permanece en el alimento en el momento de elaborar productos lácteos derivados, como el yogur o el queso blanco untable.
«La calidad funcional de la leche pasteurizada permaneció intacta, reflejando la composición en AG de la leche cruda», estableció la investigación.
Dejá tu comentario