En un año electoral decisivo para los EE.UU. y los mercados del mundo por lo que vaya acontecer y por el accionar de la Reserva Federal(Fed) los grandes jugadores están recalculando el juego y las apuestas. En tal sentido, el mayor banco de inversión del mundo, Goldman Sachs, cambió su cautelosa postura con la renta variable a una más arriesgada, y otro tanto reconoció el mayor fondo del mundo, BlackRock, que al respecto considera atractivos a los mercados emergentes.
Alerta en los mercados: Goldman y BlackRock recalculan, seducidos por las acciones
El buen arranque de año ha hecho replantear las proyecciones del banco de inversión y el fondo más grandes del mundo y las apuestas en Wall Street.
-
Un gigante de Wall Street responde 5 claves del mercado
-
EEUU: la avalancha de sorpresas que dejó la economía en enero y una espera que se alarga

El S&P rompió récords en Wall Stret y seducen las acciones a la hora de invertir.
En el caso del Goldman fueron las mejores perspectivas de crecimiento económico y de recuperación de la actividad industrial los detonantes para el cambio de humor. Los estrategas del banco esperan que el crecimiento se convierta en un motor más importante del apetito por el riesgo y además que las correlaciones entre la renta variable y la renta fija sean más negativas en 2024.
Mientras que BlackRock no ocultó ahora su preferencia por los activos de países emergentes porque la propensión al riesgo sigue manteniendo una tendencia optimista. Explica que a medida que la economía estadounidense crece por encima de lo esperado, la inflación se relaja y la Fed se prepara para recortar las tasas de interés, todo ello es un cóctel para un mayor estímulo en los mercados emergentes, dado el optimismo del mercado hacia los activos de riesgo.
Goldman, por su parte, considera que la perspectiva de una relajación monetaria de la Fed y del resto de bancos centrales apoyaría el precio de las acciones, a pesar que los ciclos de relajación han sido históricamente favorables para los activos de riesgo, porque creen que los mercados ya negociaron gran parte del alivio de tasas.
Claro que también el banco estadounidense pondera el potencial de crecimiento de los beneficios mundiales que sigue siendo relativamente moderado debido al menor crecimiento de los ingresos y la mínima mejora de los márgenes. De todos modos recuerda que el crecimiento económico mundial crea riesgos al alza para el crecimiento de los beneficios. Es que si bien las acciones digirieron bien hasta ahora el aumento de los rendimientos de los bonos con un mejor crecimiento, aún existe el riesgo de un escenario de que buenos datos sean malas noticias.
Las perspectivas para los emergentes
En este contexto, Goldman ajustó al alza la estimación del S&P 500 a los 5.200 puntos a fin de año luego de quebrar la marca de los 5.000 por primera vez en la historia. Esperan que el fuerte crecimiento del PBI mundial y un dólar ligeramente más débil apoyen los beneficios por acción, mientras que la baja de las tasas y de los precios del petróleo compensará. El banco apuesta a los valores tecnológicos y de gran capitalización, especialmente los llamados 7 Magníficos, como los grandes impulsores de los beneficios del S&P 500 en 2024.
Mientras que el fondo liderado por Larry Fink cree que la robusta actividad económica estadounidense mitigó las preocupaciones de los inversores sobre una recesión, lo que se traduce en una bendición para los mercados emergentes.
Señalan los estrategas de BlackRock que mientras los mercados descontaban los fuertes recortes de las tasas de la Fed, los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. a 10 años caían desde sus máximos cercanos al 5%, lo cual ayudó a reducir la brecha entre los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. y los rendimientos de la deuda de los mercados emergentes en moneda fuerte.
Por ello sobre-ponderan en su cartera a la deuda de los mercados emergentes en moneda fuerte, generalmente emitida en dólares. Se trata, para ellos, de un valor relativo atractivo que se ve protegido de la debilidad de sus divisas a medida que los bancos centrales de los emergentes reducen las tasas. Por lo que apuestan a que las perspectivas para los activos de los mercados emergentes sean favorables ya que el sentimiento del mercado se mantiene positivo.
Sin embargo, recomienda selectividad ya que estiman que la selección es clave debido al desempeño divergente de los países. Ven por ejemplo que hay grandes cambios estructurales que crean oportunidades específicas a través de las distintas mega-fuerzas que ellos monitorean. Es que la fragmentación política es una de estas mega-fuerzas que entra en acción a medida que se endurecen los bloques geopolíticos y aumenta la competencia económica.
Hay divergencias entre emergentes para inversores
En tal sentido, hay países conectores como México que actúan cada vez más como socios comerciales intermedios entre bloques, lo que hará que los valores mexicanos se vean beneficiados y deban ser tenidos en cuenta por los inversores. Asimismo, la divergencia demográfica, otra de las mega-fuerzas, favorecerá a muchos emergentes que tienen poblaciones más jóvenes y en crecimiento frente a las sociedades envejecidas de Europa o EE.UU. Por ejemplo, la India donde también su ecosistema de nuevas empresas y sus compañías de software con presencia global la convierten en un centro prometedor para la inteligencia artificial (IA). Tanto la disrupción digital como la IA es otra de las mega-fuerzas que será un impulsor clave de las ganancias corporativas, para BlackRock.
Señalan que estos factores respaldan el impulso de las acciones indias, incluso cuando las valoraciones a 12 meses vista están cerca de sus niveles más altos de los últimos 20 años, en cambio, las de México están más cerca del promedio de 20 años.
Otro elemento que consideran es que estas mega-fuerzas favorecen áreas de inversión como la infraestructura por lo que creen que cerrar la brecha financiera ofrece oportunidades, pero requerirá reformas del sector público e innovación del sector privado.
Dejá tu comentario