Empresarios creen que crecerán menos

La resolución del conflicto con el campo les cambió el humor a los empresarios, que en una gran mayoría ahora creen que este semestre la economía estará «moderadamente mejor» o «igual» que en los seis meses anteriores. A mediados de julio, los que pensaban en una «moderada mejoría» eran apenas 15%, y 42% se confesaba pesimista respecto de las perspectivas económicas.

Así surge de la encuesta «Expectativa de los ejecutivos», encargada como todos los años por IDEA (Instituto para el Desarrollo Empresario Argentino) a la consultora D'Alessio Irol, y cuyos resultados fueron presentados ayer.

Las preguntas fueron respondidas entre el 16 y el 20 de julio pasados por 245 altos ejecutivos elegidos por partes iguales en empresas de capital local y extranjero. Bernardo Kosacoff, que tuvo a su cargo la presentación, aseguró que «volvimos al clima de negocios que había en 2003, pero el voto de Julio Cobos mejoró notablemente el humor de los encuestados».

En lo que hace al último semestre, sólo 5% de los entrevistados afirmó estar «moderadamente mejor», mientras que 55% dijo estar «igual» y el restante 40% dijo estar «moderadamente peor».

Respecto del empleo, sólo 1% dijo que su empresa lo «aumentará significativamente», y apenas 5% confesó que «disminuirá significativamente». La mayoría (54%) se inclinó por la opción «no se modificará». El optimismo es menor en lo que hace a «ventas»: apenas 36% dijo que facturará lo mismo, pero 39% eligió la respuesta «disminuirá».

Sin embargo, en línea con las evaluaciones de los principales economistas del país en relación con el PBI, 80% de los empresarios espera crecimiento para su empresa en 2009, y sólo 20% dice que su organización no crecerá. A la cabeza de los factores que favorecen el crecimiento los entrevistados ubicaron la «diversificación de productos y servicios» (19%); del lado negativo, lo que más retrasaría ese crecimiento es el «aumento de costos» (14%), seguido de la «retracción del mercado» (10%).

Entre los costos que se dispararon, 50% de los encuestados ubica a los salarios -aumentaron por encima de los precios de sus productos-; en sentido inverso, 29% confesó que su masa salarial creció menos que sus precios.

La falta de inversión y renovación en la industria se evidencia en que 52% de los encuestados dijo que su planta fabril opera entre 85% y 100% de su capacidad instalada. Otro 30% se ubica entre 71% y 85%, y el restante 18% dice que sus fábricas trabajan a entre 50% y 70% de su capacidad. Está claro que si más de 80% de las fábricas argentinas utiliza casi la totalidad de su capacidad de producción, hay lugar para ampliaciones y modernizaciones;los empresarios suelen argumentar que estas inversiones no se producen por dos factores: la falta de crédito a largo plazo y la histórica inestabilidad del escenario económico argentino.

Kosacoff cerró el encuentro explicando que la encuesta demostraría que los empresarios están convencidos de que «la base macroeconómica está sólida, pero les preocupa si se podrá sostener el desarrollo de sus negocios». En este sentido, agregó, lo que detiene las inversiones es que «no se sabe qué ocurrirá de acá a cinco años».