Gobierno renovó su embestida contra las consultoras y negó que exista una "inflación descontrolada"

El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, aseguró que "no existe inflación descontrolada" y sostuvo que las consultoras privadas no van a decir cómo miden la escalada de precios, porque "no lo hacen".

El funcionario se mostró molesto por las críticas que expresó la oposición sobre la ausencia del tema de la escalada de precios en el discurso de la presidente Cristina de Kirchner ayer en la Asamblea Legislativa.

"La inflación descontrolada no existe", sostuvo el funcionario y reconoció que "algún tema pudo faltar" en la revisión que la jefa de Estado hizo sobre las deudas pendientes de la economía y los logros alcanzados durante su gestión.

El funcionario señaló que la mandataria puntualizó los niveles de inversión, crecimiento y crédito con "números (oficiales) reconocidos internacionalmente y así dio cuenta de la "situación general en que se encuentra la Argentina"

Por eso, consideró que "la inflación estuvo explicada en si misma (en el discurso). ¿Hay que ponerle título? Y bueno (la Presidente) no le ha puesto título. Siempre le van a encontrar (los opositores) una vuelta para discutirlo, y eso no está mal porque forma parte de la democracia".

Fernández minimizó las críticas que realizaron Ricardo Alfonsín y Francisco De Narváez por la ausencia del tema del encarecimiento del costo de vida en el discurso presidencial, pero igual no ocultó su molestia.

Por otra parte, cuestionó con dureza las estimaciones que las consultoras privadas realizan de la escalada de precios en la economía doméstica y desestimó que esos índices reflejen la realidad.

Afirmó que "está claro que esa inflación que durante muchos años las consultoras le han querido expresar a los argentinos ha sido desnudada definitivamente cuando la secretaría de Comercio Interior les pidió que digan como hacen los índices y ahora ninguna lo va a revelar".

"No van a revelar cómo miden la inflación porque ninguno puede medirlo, nadie puede medirlo. Porque no hay forma de gastar semejante cantidad de dinero para no cobrar nada por esos índices. No lo hacen", dijo el jefe de Gabinete.

Antes, el economista Orlando Ferreres, dueño y presidente del estudio que lleva su nombre, aseguró hoy que "muchos de los consultores tienen miedo" a represalias del Gobierno por sus publicaciones sobre la inflación real.

La consultora de Ferreres fue multada la semana pasada por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, en $ 500.000 por difundir cifras sobre la escalada de precios en la economía doméstica más altas que las del Gobierno.

El economista advirtió que "con los ruidos que se generaron con esta presión oficial, muchos de los consultores ahora tienen miedo, que es lo que procura la presidente Cristina de Kirchner al avalar al Indec hace poco tiempo, porque queda perfecto".

En declaraciones a Radio de la Ciudad, Ferreres agregó: "Esto ya no es un tema de Guillermo Moreno o del Indec sino de las más altas autoridades nacionales".

Aclaró que la Orlando Ferreres y Asociados, su consultora, "no vende el servicio de medición de precios a nadie sino que lo usa como insumo para procesar otros datos, pero no se vende; por lo tanto, están atacando la libertad de expresión".

Dijo el economista que tras conocerse la intención del Gobierno de aplicarle una sanción recibió mucha solidaridad, aunque optó por esperar a que el secretario de Comercio Interior confirme la multa.

"Igual, sé que en el Congreso nacional quieren hacer un acto y en la OEA quieren llamar a una reunión para repudiar la falta de libertad de expresión", dijo el economista al ser consultado por la sanción que recibiría su consultora.

Arriesgó que si avanza la sanción, "va a tener mayor repercusión local e internacional" y generará polémica en el plano político en medio de un año electoral.

Admitió que sus colegas economistas "se sienten presionados" por lo que le está ocurriendo y contó que "casi todos" lo llamaron o enviaron un e-mail para "solidarizarse".

"Sin ir más lejos, el viernes registré en mi celular 172 llamados sin contestar y eso que estuve hablando todo el día. El común denominador de los mensajes son de impotencia a indignación por esto que está pasando", dijo Ferreres.