Hoy industria crece en serio

El INDEC confirmó ayer que la producción industrial tuvo, en setiembre, un muy buen mes: subió 0,7% en relación con agosto y 10,7% respecto del año pasado. En lo que va de 2004, el alza acumulada llega a 11,5% y está a sólo 5% de lograr el récord de actividad de junio de 1998, cuando comenzó la larga recesión que terminó con el default y la salida de la convertibilidad. Este crecimiento industrial está impulsado por sectores clave y expansivos como el automotor, la construcción, la siderurgia, los textiles, el papel y los minerales básicos. En todos estos casos se combinan tanto las exportaciones como la sustitución de importaciones y la expansión del consumo interno. El panorama es favorable, pero hay una amenaza en el futuro. La capacidad instalada se ubica en 72%, un nivel alto y peligroso en un país donde el acceso de las empresas al crédito para ampliar esas plantas es difícil.

La actividad industrial creció 10,7% en setiembre, en comparación con igual mes del año pasado y se expandió 0,7% en relación con agosto, superando así todas las expectativas de los analistas. La confirmación de esta noticia la dio ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos, que presentó el informe del Estimador Mensual Industrial (EMI) y que, como anticipó este diario, se recuperó en el tercer trimestre, acumulando un alza de 2% contra el período anterior.

De esta forma, la industria dejó atrás los efectos negativos generados a comienzos de 2004 por la crisis energética, que incentivaron un pico de producción en el mes de marzo seguido de un colapso en abril, lo que arrastró el promedio del segundo trimestre 1,3% por debajo del primero.

Sectorialmente, en setiembre las ramas que más subieron fueron la automotriz (+ 53,9%), los metales básicos (+16,3%) y los textiles (15,1%).

Ahora, el indicador nuevamente recompone su tendencia alcista, aunque amenazado por el alto grado de utilización de la capacidad instalada, que limita su crecimiento potencial. Este nivel volvió el mes pasado a registrar otro máximo desde la devaluación y se ubicó en 72% (ver vinculada).

Al margen de la indudable limitación que significa el alto grado de uso de las instalaciones, el gobierno no está preocupado por la performance de la industria para lo que resta del año. Si bien se descarta la posibilidad de ocurrencia de otro shock por parte de la oferta, Economía estima que aunque la actividad se estancara el último trimestre, igualmente finalizaría el año con un alza de 10%. La proyección del EMI para todo 2004 contempla una expansión en torno a 11 por ciento.

En tanto, la encuesta cualitativa industrial que realiza todos los meses el INDEC a empresarios industriales para conocer sus expectativas para el cuarto trimestre respecto de igual período de 2003, arrojó resultados marcadamente más optimistas. El 30,4% de los entrevistados señaló que espera una suba en la demanda interna, 10,1% más que en agosto; mientras 62,5% no anticipa cambios y sólo 7,1% prevé una merma, 0,7% menos que en la medición anterior.

Por otra parte, 64,3% no espera cambios en los stocks de productos terminados (un nivel 4,9% menor que el de agosto), 26,8% pronostica una merma (3,4% más que en la encuesta anterior) y 8,9, un aumento (8,3% menos que en agosto). A continuación, las principales conclusiones de la encuesta:

• El 58,2% estima que sus exportaciones se mantendrán estables (8% menos que agosto), 34,5% anticipa un alza (11,4% más que el resultado anterior) y 7,3% piensa que disminuirán (3,4% menos).

• El 66,1% no espera cambios en sus ventas a países del Mercosur (14,9% inferior), 24,5% prevé una suba (10,2% superior) y 9,4%, una baja (cayó 1,3%).

• El 66,1% anticipa un ritmo estable en sus importaciones de insumos (13,6% menos), 32%, un aumento (15,1% más) y 1,9%, una caída (2,8% menos).