8 de septiembre 2008 - 00:00

Temor por fracaso con jubilaciones en Senado

Amado Boudou
Amado Boudou
El proyecto de movilidad jubilatoria que el gobierno consiguió aprobar en Diputados la semana pasada entrará en debate desde mañana en el Senado. Allí un plenario de las comisiones de Trabajo, Previsión Social, y Presupuesto y Hacienda deberá dictaminar sobre los aumentos de haberes a jubilados que se aplicarán cada seis meses utilizando un índice combinado entre la recaudación previsional y el índice de evolución salarial que elabora el INDEC o el que produce la Secretaría de Trabajo, según cuál sea el más alto.

La sanción de ese proyecto en Diputados tuvo tantos problemas como la ley de reestatización de Aerolíneas Argentinas. La diferencia es que esta vez Néstor Kirchner quiso poner un límite a las reformas que sus propios bloques les estaban haciendo a los proyectos de la Casa Rosada. El resultado no fue el mejor: además de los cambios al proyecto que ya había elaborado el Ministerio de Trabajo, Cristina de Kirchner tuvo que aceptar las presiones de Hugo Moyano y Hugo Yasky e incorporar la posibilidad de utilizar el índice RIPTE de la Secretaría de Trabajo como opción al que brinda el INDEC por la falta de credibilidad que despierta Guillermo Moreno tambiénen los sindicalistas. El otro problema es que el nuevo esquema será aplicado desde marzo de 2009 y hasta ese momento no se prevén otros aumentos para jubilados.

Pero a pesar de esos cambios, en el Senado el rechazo al proyecto es mayor, inclusive entre algunos peronistas que en su momento no apoyaron la ratificación de la Resolución 125. El problema sigue siendo el mismo que complicó la discusión entre los propios oficialistas: pocos creen que la fórmula de ajuste que propone el gobierno pueda ayudar a garantizar la movilidad previsional que exige la Corte Suprema y menos que los incrementos de 5% semestral que se estima saldrán del nuevo índice convenzan a los jubilados.

A pesar de las presiones que deberá soportar en el debate, el radical Gerardo Morales, presidente de la Comisión de Trabajo, y el kirchnerista correntino Fabián Ríos ya acordaron que el proyecto comience a ser tratado mañana a las 16.30.

A esa hora será recibido por los senadores el titular de la Administración Nacional de Seguridad Social, Amado Boudou. Al igual que ocurrió con la discusión de las retenciones móviles y con el rescate de Aerolíneas Argentinas y Austral, el Senado utilizará el Salón Azul y se exigirán acreditaciones especiales a quienes quieran presenciar los debates.

Los legisladores también acordaron que el jueves 11 continúe la discusión de la ley, pero esta vez con la presencia del ministro de Trabajo, Carlos Tomada.

La lista de visitas no se agotará con el ministro. Además de Boudou y Tomada, los senadores también invitarán al ombudsman nacional, Eduardo Mondino, y a su par de la Ciudad de Buenos Aires, Alicia Pierini; al secretario de Seguridad Social, Walter Arrighi; y a representantes del Foro de Jubilados y Activos del Norte Grande; de la Federación de centros de jubilados de Santa Fe; de la Confederación Argentina de Entidades de Jubilados, Retirados y Pensionados, provinciales y nacionales; de la Asociación Civil del Sector Pasivo; y del Centro de Docentes Jubilados y Pensionados, entre otros.

Sólo restan confirmar la CGT y la CTA, que, se presume, cerrarán el debate. Todo ese armado deberá terminar el miércoles 17 de setiembre, cuando el kirchnerismo quiere convertir en ley el proyecto.

Dejá tu comentario

Te puede interesar