«Hoy no podemos darnos el lujo de abandonar las políticas activas. Tenemos que atender a todos los heridos de la crisis que comenzó con la recesión de 1998 y detonó en 2001.» Con estas palabras, Felisa Miceli, que hoy cumple un año al frente del Ministerio de Economía, garantizó que el gobierno profundizará la acción social además de preocuparse por el control de los precios y el crecimiento económico.
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Sus palabras tuvieron lugar al presentar un estudio cuantitativo realizado por Hacienda y la UNICEF sobre la inversión social en la infancia. También participaron Oscar Tangelson, secretario de Política Económica, y Juan Carlos Tedesco, secretario de Educación, entre otros funcionarios nacionales. A continuación, las principales declaraciones de Miceli:
La pobreza podrá descender a través de medidas económicas que permitan superar las asimetrías sociales. Es considerada un problema de la política económica, que se genera por ella y que debe desterrarse a través de ella.
En los 90 se llegó a decir que la política social era la ambulancia que recogía a los heridos de la política económica. Prueba suficiente de que la pobreza es un problema que corresponde a esta última y que debe ser tenido en cuenta.
La crisis de 2002 fue el detonante de la recesión que comenzó en 1998, consecuencia del cierre de empresas y del aumento del desempleo. Después de la devaluación se generaron reglas para crear un nuevo orden macroeconómico, con una política de reindustrialización que posibilitó cuatro años de crecimiento sostenido y que hace avizorar un 2007 promisorio.
La tarea del gobierno es enfocar los recursos hacia donde deben ser apuntados, y la política social es uno de ellos. Nos hemos comprometido a hacer real la Ley de Financiamiento Educativo, porque sin producción nacional ni educación de calidad, la Argentina no tendrá salida en el mediano y largo plazo.
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