Expectativas de incorporación de personal tocan su techo desde 2018

El índice que releva las intenciones de contratación de las empresas mostró en octubre su mejor desempeño en tres años.

El mapa del mercado laboral ya empieza a reflejar el proceso de reactivación económica que culminará el año con una recuperación cercana al 10%. De los datos oficiales del mes de septiembre surge que ya se recuperaron todos los empleos perdidos durante la pandemia. Al mismo tiempo, todos los trabajadores que fueron suspendidos en ese período, retomaron sus funciones. Con este escenario, crecen las expectativas de incorporación de personal y el índice que elabora el Ministerio de Trabajo marca su mejor desempeño desde 2018. Los sectores productivos pronostican un 2022 con más empleo.

Sobre este punto, los datos que arroja la Encuesta de Indicadores Laborales resultan elocuentes: son cada vez más las empresas que prevén contratar personal. En octubre, las expectativas de incorporación de personal por parte de las empresas alcanzaron el mayor valor desde marzo de 2018.

El índice se elabora restando el porcentaje de empresas que tienen perspectivas de reducir sus plantillas a las que tienen planes de ampliarlo. Luego de prácticamente un año en terreno negativo, con una marca récord de -8% en junio del 2020, los valores superaron las marcas de hace tres años. El resultado positivo fue del 5%. Es decir que hoy por hoy hay más empresas que planean contratar, que las que planean despedir.

De acuerdo a los datos de la cartera que conduce Claudio Moroni, en septiembre se superó el nivel del trabajo registrado previo a la pandemia. El empleo asalariado formal en el sector privado lleva 11 meses seguidos de subas. Con un crecimiento del 1,2% en comparación a febrero del 2020, ya son 129 mil trabajadores más los que se incorporaron. Se recuperó todo lo perdido desde la irrupción del covid y se comenzó recuperar parte de lo perdido durante el 2018 y el 2019.

La dinámica se observa en el desempeño de los distintos sectores dinámicos en la generación de empleo. Un ejemplo virtuoso es el software, en septiembre se alcanzaron 124 mil puestos de trabajo formales en el sector, que viene generando 1.200 empleos por mes en 2021 y ya muestra una alza del 15% contra dos años atrás. Un escenario similar se percibe en la construcción, que según datos de la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO), lleva trece meses seguidos de recuperación de fuentes de trabajo.

Otro factor de la recuperación económica es la industria. Un rubro clave, como clave como el metalúrgico, lleva un 3,4% de expansión en la cantidad de puestos laborales en el acumulado del año. Además, las firmas del sector anticipan que en los próximos tres meses se continuará generando empleo. Según el relevamiento de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina, un 21% tiene planeado expandir su plantilla de personal en el próximo trimestre y solo un 8% ve posibilidades de reducirla.

Con la irrupción del coronavirus, las suspensiones aparecieron como una herramienta consensuada entre empresarios y sindicatos para evitar despidos en un contexto de elevados niveles de incertidumbre. Aunque debatida, porque en la práctica significaba un recorte en los salarios, se transformó en una modalidad muy difundida que afectó a más de 600 mil trabajadores.

Actualmente, todos esos empleados fueron reincorporados a sus actividades habituales. La tasa de suspensiones ya está por debajo del promedio de 2019. En octubre pasado fue del 0,9% contra el 1,2% promedio que marcó hace dos años, según los datos del Ministerio de Trabajo.