ADR se hunden hasta un 7% en Wall Street

  El mercado argentino se embarcó en una severa corrección, tras el nombramiento de Carlos Zannini como vicepresidente de una lista única kirchnerista. Como explicitaron en la jornada varios informes de la banca de inversión extranjera, la movida podría limitar el libre albedrío de Daniel Scioli en caso de ocupar el sillón de Balcarce 50.

La incógnita pasa por saber si el bonaerense tendrá suficiente margen de maniobra para ejecutar un lavado de cara en el modelo económico, como el candidato venía deslizando al rodearse de figuras más cercanas al sistema financiero como Miguel Bein o Mario Blejer.

El mercado parece tener su veredicto: la Bolsa porteña acusó un ajuste del 1,69%, hasta las 11.151,46 unidades, un derrape limitado por el buen andar de las acciones de Petrobras (+1,42%). El pavor se reflejó en el volumen operativo, que alcanzó los $ 287 millones en la rueda bursátil, su cota más alta desde el pasado 17 de abril.

La peor parte se la llevaron los papeles de Comercial del Plata (-5,99%), Banco Galicia (-5,73%) y Edenor (-4,93%), acompañando el recorrido de los ADR argentinos, que soportaron un retroceso promedio del 4% en Wall Street. Allí, las entidades financieras anotaron un desliz de hasta el 6,40%, mientras que en el segmento energético la corrección llegó al 7,31%.

El mercado de bonos no se alejó de la tendencia: entre los títulos que cotizan en el exterior, se vieron desarmes en el orden del 2 por ciento, empujando al riesgo-país por encima de los 610 puntos básicos. De esta manera, conspira contra futuras emisiones de deuda soberana, puesto que el Gobierno debería pagar una suculenta tasa de dos dígitos.

No obstante, la recaída fue un tanto menor en el mercado nacional, amparado por el tipo de cambio implícito. El Bonar 2024 cedió un 0,91% y el Bonar X otro 0,71%, al tiempo que el Boden 2015 salió indemne, con un valioso incremento del 1,10%. Por el lado de las series del canje, se percibió una ola bajista en el Global 2017 (-1,30%), el Discount ley arg. (-1,26%) y el Par ley N.Y. (-0,90%), mientras que las emisiones en moneda local quedaron relegadas al ostracismo.

Otro dolor de cabeza para el Gobierno pasa por el mercado negro, que retornó al centro de la escena y amenaza con fracturar la célebre "pax cambiaria". El billete azul logró un avance de 9 centavos hasta los $ 12,94, operando exclusivamente con clientes habituales, para gambetear la andanada de controles en la City porteña. En esta oportunidad, el despliegue estatal abarcó incluso una denuncia contra el supermercado Carrefour por destinar fondos al sistema informal.

La mira de los organismos de control se posa asimismo sobre el contado con liquidación, que ayer rozó los $ 12,35 en el ecuador de la sesión bursátil. De todos modos, el también conocido como dólar "fuga" terminó la operatoria con una suba de apenas 10 centavos, a $ 12,17, mientras que el "MEP" le pisó los talones, con un importante ascenso de 15 centavos, a $ 12,10.

El segmento mayorista no acusó recibo: el dólar sumó medio centavo, hasta los $ 9,053, controlado por la intervención de la mesa de dinero oficial, que finalizó el día con un saldo positivo de 10 millones de dólares. La soja sigue dando motivos de esperanza, puesto que encadenó otro salto del 1,20 por ciento en Chicago, para cerrar en los u$s 356,05 la tonelada.

El estruendo local relegó la volatilidad externa a un segundo plano. Sin avances en la tragedia griega, toda la atención se centró en las declaraciones de Janet Yellen, que descartó un ajuste de los tipos de interés en el corriente mes. Septiembre parece ser la fecha señalada.