Cupón PBI logró escapar a freno en los mercados

Mercedes Marcó del Pont

En los mercados argentinos nada cambió ayer. Sigue la cautela y los montos de negocios en las distintas plazas financieras están acotados, salvo cuando se trata de los cupones PBI en dólares que después de la toma de ganancias del miércoles reaccionaron con alzas del 1,41% y con negocios por $ 33 millones en el Mercado Abierto Electrónico (MAE). En otras palabras, los cupones concentraron más negocios que todas las acciones de la Bolsa de Comercio, donde se operaron $ 27 millones.

Si a los cupones se les suma lo operado en los dos bonos medianos en dólares más importantes, el Bonar X y el Boden 2015, el volumen explica casi el 30% del monto que se negocia en títulos de la deuda argentina.

Esta vez los bonos medianos en divisas tuvieron un día calmo con alzas irrelevantes. Estos papeles que tienen rendimientos de entre el 12% y el 13% todavía no han superado la depuración que están haciendo los Fondos de Inversión, que se vieron obligados a venderlos después de cambiar las reglas de valuación. Como son los bonos que más abundaban en sus carteras no pudieron venderlos rápidamente para no desplomar el valor y generar más pérdidas a sus inversores. Estos papeles están prontos a crecer.

Los otros títulos que se están siguiendo con atención son los bonos en dólares de las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Neuquén. En algunos casos, los mercados son muy reducidos y las cantidades mínimas que se exigen para entrar no bajan de los u$s 100 mil nominales. Por eso se pueden encontrar sorpresas como el Neuquén 2021, que subió el 8,1% o el Neuquén 2014, con una suba del 3,1%.

Si bien los inversores tienen sus carteras dolarizadas, no hay sobresaltos con la divisa. La demanda se mantiene constante y esto hizo que el «blue» cotizará a $ 6,37, el mismo valor que el día anterior.

La estabilidad de los valores de los bonos en dólares hizo que el «contado con liquidación», el dólar que se utiliza para fugar capitales, baje 3,30 centavos, a $ 6,5170.

En el Forex-MAE, la principal plaza mayorista cambiaria, los negocios retrocedieron a u$s 146 millones. El dólar abrió a $ 4,631, pero pronto subió a $ 4,633. En ese momento apareció la mesa de dinero del Banco Central y comenzó a vender dólares por debajo de ese precio. Cuando la divisa bajó a $ 4,632, la gente de la mesa puso reversa y se transformó en compradora. No sólo logró recuperar lo que había vendido, sino que se hizo de u$s 30 millones más.