Cupones bursátiles

Al momento de publicarse esta columna, es probable que el Merval porteño haya trascendido otra frontera muy seductora: la de los «2.300» puntos. Y no debería extrañar que se vaya, muy rápido, a la siguiente estación de la estadística: visto que los mercados parecen venir a bordo del «tren bala» (y del dólar dulce).

Para dar una idea general, al lector que no lleva los números del pasado a mano, podemos apuntarle que el «máximo histórico» (nominal) que ha tocado el índice más difundido de nuestra Bolsa -considerado en cierres mensuales- ha sido el de «2.351» puntos. Y esto lo concretó en: octubre de 2007. A finales de la primera rueda semanal, llegó a situarse en las «2.290» unidades. Y si bien resulta una brecha todavía de «61» puntos, al fijarse en tal altura el nivel porcentual necesario es apenas del 2,7%, para instalarse nuevamente en aquella cumbre del 2007.

Solamente una rueda como la del lunes, repetida, daría la diferencia faltante para ello. También vale el recuerdo de unos pocos días atrás, cuando se concluyera octubre de 2009: en los «2.115» puntos, solamente.

A partir de la línea de «2.351» puntos, se comenzaría a recorrer un territorio inédito para nuestro índice. Fantás-tico raid de logros en cotizaciones ponderadas, que parece tomar más energía a medida que más se sube: en una retroalimentación del mercado -copiando en gran medida, lo que sucede en varios otros lugares- y sin necesidad de traer fuentes adicionales, a la misma base de negocios que arrastra en el año.

... y esto nos transporta a la otra faceta, a la segunda comparación de las distintas épocas. En la rueda del lunes pasado, el total en acciones no pasó de los 65 millones de pesos efectivos. Esto estuvo cercano a lo que fuera el promedio del mes pasado.

Ahora, cuando volvemos la vista atrás y focalizamos el ritmo de negocios en acciones de aquel octubre de 2007: pues que hallamos un promedio por rueda en los 114 millones de pesos. El pico más alto del mes se fijó en la rueda del 25/10/07, cuando el mercado alcanzó a movilizar: ¡$ 197 millones! En acciones. Cierto que, en aquel momento, significó el principio de la pendiente y la debacle crítica del 2008. Ahora, la tracción se utiliza en suba y continua resultando tan llamativo: que no se expanda en negocios, cuando tanto crece en precios. Atípico, histórico.