Curioso acuerdo aparta a jueza

La jueza de la Cámara Nacional de Casación Penal, Ana María Figueroa, no podrá expedirse sobre causas de Derechos Humanos. Así lo definieron sus pares de la Sala II luego de aceptar una recusación en su contra por presunta imparcialidad. A partir de este acuerdo, la camarista es automáticamente apartada de los expedientes de dicha temática que llegan al primer piso de los tribunales de Retiro, lo cual ha desatado distintos cruces entre los jueces.

El origen de la polémica se dio con la llegada de un expediente que tiene por protagonista a Abel Dupuy, exdirector de la Unidad Penal 9 en La Plata durante el último Gobierno militar y condenado a prisión perpetua por Tribunal Oral Federal N° 1 de esa ciudad. Sus abogados presentaron recursos en la Casación, entre ellos, la recusación de Figueroa. Los letrados entendieron que la jueza no es imparcial ya que antes de llegar a su cargo se desempeñó en el área legal de la Secretaría de Derechos Humanos.

Figueroa respondió alegando que ella no intervino en el expediente de Dupuy durante su paso por el Ministerio de Justicia. A pesar de esto, los camaristas Alejandro Slokar, Ángela Ledesma y Juan Carlos Gemignani, aceptaron el recurso y apartaron a Figueroa. Lo curioso es que desde la Secretaría de Derechos Humanos que dirige Luis Alem también fue apoyado el pedido de recusación.

Con este precedente Figueroa ya ha sido apartada, por lo menos, en doce expedientes distintos, sin importar siquiera que los abogados defensores así lo pidan.

No es el primer cruce de Slokar con jueces de la Casación. En 2011 había cuestionado a Luis María Cabral y Mariano González Palazzo por el sistema de subrogancias que funciona en la Cámara.