Nos apartamos un minuto de lo local para que el lector mejor comprenda lo que está sucediendo en el mercado global. En abril, este lunes y este martes, Ben Bernanke visitó Japón como consultor del premier Abe y las máximas autoridades económicas niponas, para discutir la viabilidad de instrumentar lo que se conoce como "Helicopter Money" para impulsar la economía. Si bien fue desmentido y confirmado innumerables veces en las últimas horas, parecería que el Imperio del Sol Naciente sería la primera nación del planeta en recurrir a este esquema. ¿De qué se trata? Luego de la crisis 2007/8 los bancos centrales trataron de salir siguiendo el camino clásico de reducir tasas de interés e inyectar dinero en el sistema financiero para que lo preste a los privados. Pero esto no funcionó y los intermediarios (bancos) terminaron recolocando la inmensa mayoría de los fondos tomados a tasas cercanas a cero, en opciones remuneradas por el Estado. Luego vinieron los "Quantitative Easing" (facilitamiento cuantitativo), por el cual los centrales recompraban títulos, primero estatales y luego privados, buscando una inyección más directa. Esto tampoco funcionó y derivó en un círculo vicioso de tasas descendentes a niveles negativos (trampa de liquidez) y la aparición de burbujas varias. La alternativa de Japón, siguiendo una idea de Milton Friedman de 1969 retomada por Bernanke en 2002, es "darle dinero directamente a la gente para que lo gaste": se imprime por única vez una masa significativa de moneda y se inyecta directamente en la economía (como si fuese adrenalina en el corazón de un moribundo), sea mediante acreditaciones bancarias, un retorno impositivo, un bono perpetuo (desmonetiza el déficit), etc. El resultado cierto, sólo que estamos pisando prados nunca antes hollados, con consecuencias impredecibles. Estos dimes y diretes alcanzaron para neutralizar la "no baja" de tasas británica, impulsando una vez más los activos externos que coadyuvaron a que el Merval trepara 1,68% en los primeros 10 minutos de operaciones, de ahí hasta cerrar 2,14% arriba en 15.469,65 la cosa fue local. Al frente, "los de siempre": Petrobras Brasil trepando 4,71%, San Miguel 4,17% y Consultatio 4%, con Cresud +3,79% como el segundo más operado ($48,7 millones) y Petrosur +34,92% la estrella (con apenas $1,3 millón). Lo peor, el -2,9% de Aluar y el -1,96% de Siderar. El volumen trepó 33% a $370 millones con 59 alzas, 6 sin cambio y 21 bajas.
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