El rock criollo recobró su más legendario reducto

Igual que en otros lugares donde se toca rock, el lugar más visitado por el público en la Perla del Once es el baño. Aunque en este caso no hay que pensar mal: es que la frase «En el baño de la Perla compusiste La balsa, Tanguito» retumba desde un viejo disco hace décadas, y lo primero que fascina al visitante del bar son los baños. Los músicos amigos de aquellos años locos se ríen un poco de la fascinación por el baño de la Perla (hay un cartel que explica la leyenda de «La Balsa» antes de los toilettes), unos recordando que en realidad, a fines de los 60, cuando La Perla era un bar cualunque y no uno temático como ahora, los baños estaban en otra parte del edificio. Hay hasta algún viejo lobo del rock & roll que, cuando alguien lo molesta demasiado, lo manda al baño a ver si aparece el fantasma de Tanguito (parece que algunos hasta le creen.)

Pero lo importante e inédito de este regreso a la Perla al rock nacional es la posibilidad de ver a los auténticos pioneros haciendo lo suyo en primer plano. Es decir, en un ambiente que ellos conocieron bien cuando no eran nadie, y a una distancia tan corta del público como para mantener un diálogo íntimo entre público y artistas que nunca se dio de este manera en ningún lado en nuestro país (y tampoco en lugares carísimos del primer mundo como The House of Blues, el mejor equivalente cuando se piensa cómo analizar este tipo de fenómeno).

Entre los organizadores de estos shows en La Perla está el mismo baterista de Almendra, Rodolfo García, y a veces se arma una especie de «all star band» como la de hace pocas semanas con el Beatnick y Barra de Chocolate, Pajarito Zaguri, con el líder de Vox Dei, Ricardo Soule y el tecladista de Los Gatos, Ciro Fogliatta, agotando todas las localidades. Entre los próximos números recomendados de esta verdadera Escuela del Rock se puede mencionar a Kubero Díaz (la Pesada del Rock) el 17 de agosto, los legendarios Alma y Vida (18 de agosto), Ricardo Soule y su nueva banda La Bestia Emplumada (25 de agosto) y por supuesto, el viernes 31 el regreso a la Perla del Once del nuevo Manal de Javier Martínez.

D.C.