13 de abril 2011 - 00:00

Horror en México: los narcos asesinaron al menos a 116 inmigrantes

Estos son los detenidos por la última matanza de inmigrantes centroamericanos perpetrada por la mafia del narcotráfico en el norte de México. En algo más de cuatro años, la violencia de los carteles dejó 36.000 muertos en ese país.
Estos son los detenidos por la última matanza de inmigrantes centroamericanos perpetrada por la mafia del narcotráfico en el norte de México. En algo más de cuatro años, la violencia de los carteles dejó 36.000 muertos en ese país.
Ciudad de México - Los mexicanos seguían ayer en estado de conmoción las excavaciones en el estado de Tamaulipas, donde se encontró una fosa clandestina con al menos 116 víctimas de del narcotráfico, en lo que constituye la mayor matanza de ese tipo registrada en el país.

La procuradora general, Marisela Morales, informó ayer el hallazgo de 28 nuevos cuerpos, con lo que se llega hasta ahora a ese total de 116, y dijo creer que ése no será el saldo final. Asimismo, reveló que 17 personas fueron detenidas en relación con los asesinatos, que empezaron a conocerse la semana pasada a partir de la aparición de los primeros pozos en el municipio de San Fernando.

«La Procuraduría General de la República no escatimará esfuerzo alguno para lograr el esclarecimiento de los hechos», afirmó.

Hasta el lunes se había informado el hallazgo de 88 cadáveres en 14 narcofosas en el extenso municipio de más de 6.000 km2, donde el año pasado habían sido asesinados 72 emigrantes centro y sudamericanos por supuestos miembros del grupo de Los Zetas que, según un sobreviviente, pretendían reclutarlos a la fuerza.

La organización criminal recurre cada vez más al secuestro de inmigrantes indocumentados extranjeros que intentan llegar a Estados Unidos a través de territorio mexicano para pedir rescate a sus familiares, lo que constituye un modo lucrativo de financiarse (ver aparte).

La mayoría de los secuestros ocurre en un cruce de caminos frecuentemente utilizado por miles de emigrantes centroamericanos, sudamericanos y mexicanos que tratan cada año de cruzar la frontera norte. En los últimos días, una gran parte de las líneas de colectivos que pasan por San Fernando suspendió sus recorridos al no haber garantías de seguridad, informaron medios locales.

Respuesta oficial

Cientos de familiares acuden desde el lunes al servicio médico forense de la ciudad de Matamoros, pero hasta el momento apenas han sido identificados, con nombre y apellido, dos mexicanos y un guatemalteco. La fiscal Morales dijo que un grupo de más de 30 peritos trabaja en la identificación de los cuerpos.

Dada la magnitud del caso, el Gobierno del presidente Felipe Calderón dispuso reforzar la presencia de militares y policías federales en la zona, fronteriza con Estados Unidos, ante las «atrocidades» cometidas por grupos de la delincuencia organizada, aseveró el ministro de Gobernación, Francisco Blake.

El funcionario afirmó que esta matanza es una muestra del «perfil despiadado y la ambición sin límites» de organizaciones criminales, cuya acción va más allá del tráfico de drogas y busca «atemorizar a la población», en un contexto de «fragilidad institucional».

En el anuncio ante la prensa estuvo también el gobernador de Tamaulipas, Egidio Torre Cantú, quien ganó las elecciones el año pasado después de que su hermano Rodolfo, que era el candidato original, fue asesinado seis días antes de los comicios.

Blake manifestó su sensibilidad con el «drama que vive cada una de las familias» de las víctimas de Tamaulipas y afirmó que las fuerzas federales se mantendrán en ese estado «hasta someter y castigar a los delincuentes y a toda su red de complicidad».

«El Gobierno federal no se detendrá en hacer valer la ley, el orden y la justicia en Tamaulipas y el país», afirmó. «No es tiempo de titubeos; hoy más que nunca reitero la necesidad de profundizar la lucha contra el crimen, del imperativo de avanzar en la depuración policiaca en todo el país, de la urgencia de escalar las capacidades institucionales por medio del fortalecimiento de las policías estatales y municipales», declaró el ministro del Interior.

Entre los detenidos por los crímenes figura Armando Morales Uscanga, quien refirió haber tomado parte en el secuestro y asesinato de pasajeros el 24 y el 29 de marzo.

De igual forma, mencionó haber participado en la matanza e inhumación ilegal de los 43 cuerpos localizados en la misma área el 6 de abril. El detenido portaba cerca de 5.000 dólares en moneda nacional y divisa estadounidense, así como un arma larga.

Al asumir en diciembre de 2006, el presidente Calderón decidió militarizar la lucha contra el narcotráfico. Desde entonces, la acción de las fuerzas de seguridad, la violencia de los carteles y la lucha entre éstos por controlar territorios han dejado un saldo de al menos 36.000 muertos.

Agencias EFE, AFP, Reuters, ANSA y DPA

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