Macri denunció complot en queja de colectiveros

De circo: un vecino de la Capital ensayó ayer el cruce de las calles del centro saltando sobre los techos de algunos de los 600 colectivos que inauguraron una nueva forma de activismo: la protesta preventiva. Se quejaron de una medida que Mauricio Macri aún no tomó -está negociándola con sectores- sobre la circulación de los taxis por algunas calles de Buenos Aires. Con razón, el jefe de Gobierno anotó esta algarada en las presiones que sectores del gobierno nacional -esta vez por la vía del gremio de transportes- hacen sobre su gestión. El resultado fue otra vez el caos, con algo de circo, en el centro porteño.

Unos 600 colectivos paralizaron por más de dos horas, ayer, el centro porteño al marchar hacia el palacio municipal en rechazo a la medida que permitiría a taxis sin pasajeros desplazarse por sus carriles exclusivos.

Una manifestación de colectivos paralizó ayer el ya complicado tránsito porteño en una movida que el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, calificó de «rara» y «abstracta», ya que fue en rechazo de una medida -contra los taxistas-que aún no se implementó.

El gobierno macrista se ve preso de una interna de gremios del kirchnerismo que a su vez intentaría mortificarlo.

Una caravana de cerca de 600 colectivos de distintas líneas marchó ayer para manifestar su oposición a que los taxis circulen vacíos por los carriles exclusivos que serán habilitados para el transporte público de pasajeros. El Gobierno porteño consideró que el reclamo era «abstracto» y que «fue de gusto», ya que la medida se implementaría recién a fin de mes, en las avenidas Callao y Córdoba, junto con otras orientadas a mejorar la circulación caótica que tiene la Ciudad de Bue-«Es una discusión entre ellos que lleva décadas. La rivalidad no se va a resolver, porque es como un Boca-River, pero no debe dejar de rehén a la gente», señaló Rodríguez Larreta.

Desplazamiento

La protesta comenzó, como lo habían anunciado, a media mañana hasta que al mediodía la caravana se instaló sobre la Avenida de Mayo donde está la sede del palacio municipal, en su intersección con Bolívar hacia el oeste.

Las filas de colectivos comenzaron a desplazarse a las 9 por las avenidas San Juan y Santa Fe y luego marcharon por la 9 de Julio hasta la Avenida de Mayo, provocando la ira de los conductores particulares, además de los usuarios que se vieron privados del transporte por casi toda la mañana.

El titular de la Cámara que reúne a los empresarios de las líneas de colectivos (CETUBA), Alberto Crespo, explicó que «es imposible que por los carriles exclusivos circulen los taxis desocupados que van a 5 kilómetros por hora buscando pasajeros». La propuesta del Gobierno porteño es casi la que piden los colectiveros, pero en junio pasado los taxistas realizaron un paro con marcha también, rechazando la posibilidad de circular sin pasajeros por la mano izquierda en determinadas avenidas, como quiere el macrismo.

«Si van a hacer los carriles exclusivos y van a dejar que los taxis vacíos circulen por ahí adentro, la medida no va a servir para nada», criticó Crespo.

Rodríguez Larreta, por su parte, remarcó que «los taxis llenos van a estar en los carriles exclusivos, y los vacíos, en horas pico, no se encuentran por ningún lado, por lo que no serán tantos los que deberán circular por otro lado».

«Tenemos un proyecto más ambicioso sobre la avenida Juan B. Justo, una especie de subte en superficie. En 20 minutos se circulará de punta a punta la Juan B. Justo y se sacarán los boletos abajo», anunció además Rodríguez Larreta, quien admitió que todavía no hay una solución para el conflicto entre taxis y colectivos.