Oposición poda más de $ 2.000 M al PRO

A pesar de las explicaciones que entregó el ministro de Hacienda porteño, Néstor Grindetti, para justificar gastos por $ 25.400 millones en el año electoral, la oposición ya le rebajó esas expectativas insistiendo con el voto negativo a algunas fuentes de financiamiento.

El ministro inauguró ayer en la Legislatura la ronda de debate del presupuesto 2011, que en principio llegará al recinto el 30 de noviembre.

Grindetti remarcó que «la inflación se ha instalado entre nosotros. Resulta imposible confeccionar un presupuesto sin reparar en ella» pero que el presupuesto era equilibrado.

El proyecto considera: $ 25.422,3 millones en total para gastos, el 23,3% más que este año; $ 6.990 M para Educación; Salud, $ 5.327 M; Desarrollo Social $ 1.760,4 M y entre otros rubros unos $ 5.000 M para obra pública. Pero, tanto la terminación de subterráneos como remodelaciones de centros culturales están supeditados a la generación de nueva deuda y al aumento del impuesto de Alumbrado Barrido y Limpieza (ABL).

No sólo la oposición ahora rechaza la suba de ABL que promediaría el 22%, sino que también objeta el uso de $ 374 millones del Banco Ciudad de Buenos Aires que tomaría el Gobierno (también debe autorizarlo el Banco Central). A eso se agregan las objeciones a la refinanciación de los Bonos Tango que vencerán el año que viene por $ 1200 millones, una nueva emisión por $ 735 M, y otros $ 500 M en colocación de Letras del Tesoro. En total la oposición al macrismo le estaría restando más de $ 2.000 millones para 2011 si le niega todas esas posibilidades. Sólo el aumento de ABL -difícil de aprobar- le quita $ 300 millones.

«En un año de electoral, Macri quiere que la fiesta la paguen los ciudadanos, con más impuestos y mayor endeudamiento», opinó el legislador Aníbal Ibarra, que criticó especialmente el uso de las ganancias del Banco Ciudad.

El kirchnerista Francisco Nenna, del gremio docente, se quejó porque el proyecto no incluye previsión para subas salariales, mientras que el bloque Proyecto Sur (Solanas) señaló en un comunicado que el aumento del ABL es «una medida regresiva que afecta directamente a los sectores medios» porque «el cálculo se basa en el valor de mercado» y los barrios medios tuvieron mayor dinamismo.