Producir novillo a campo es un 40% más barato que en feedlot

Producir un novillo pesado a campo es un 40% más barato que engordarlo a corral. A los argentinos nos costará más de $ 1.600 millones la nueva iniciativa del Gobierno de compensar el engorde de novillos pesados a corral.

Durante años hemos insistido en que las acciones del Gobierno -intervenciones en los mercados, falta de transparencia, cierres de exportaciones, entre otras- no nos permitían hacer la rotación agrícola ganadera ideal para la conservación de nuestros suelos, obligándonos a hacer una producción poco sustentable en el tiempo.

Hoy el sinceramiento de los precios ganaderos, en respuesta a todo lo mal que se hizo desde el oficialismo durante estos últimos cuatro años, nos permitiría nuevamente retomar el camino que en 2006 nunca debimos dejar.

CARTEZ publicó un trabajo en ese año donde ante el cierre de las exportaciones proponíamos su nueva apertura total y sin límite, para incentivar la producción del novillo pesado. Esta acción nos traería como ventaja exportar sólo el 10% del animal e integrarlo con el mercado interno para dejar el 90% restante -la carne que más consumimos los argentinos: asado, matambre, vacío, etc.- a un precio muy barato.

Momento ideal

Era el momento ideal porque teníamos alrededor de tres millones de novillos pesados y esta acción hubiera cubierto el consumo, a 270 kilos de carne/animal que quedaban en el mercado interno, del 40% -16 millones de personas- de la población.

Hoy, la Secretaría de Comercio Interior descubrió la «gran barata», que es permitirles a algunos frigoríficos exportar cortes caros con la condición de que dejen una parte de la producción de carne barata en el mercado interno. La diferencia es que hoy sólo tenemos 1,2 millón de novillos pesados y esta acción sólo alcanzaría para el consumo -con los niveles actuales- del 10% de la población.

Hoy tenemos la oportunidad de revertir esta situación. Pero ¿está dispuesto el Gobierno a hacerlo? Una de las últimas noticias, de incentivar al novillo pesado a corral, nos indica que no es así.

El problema no es -con el actual precio de la hacienda en pie- que no se puede tener el animal en el campo por la competencia con la agricultura, como dijo un funcionario: si tuviéramos reglas de juego claras hoy podríamos producir en forma rentable carne en campos agrícolas, ya que en los mismos se podría lograr -con suplementación estratégica de granos- alrededor de 800 kilos de novillo por hectárea, lo que implicaría un ingreso bruto de $ 5.000 por hectárea -contra los $ 2.400 por hectárea que ingresarían con una soja de 30 quintales por hectárea-.

Con el sistema que quiere implementar el Gobierno seguiremos dependiendo de las compensaciones (cuadro 1) cuando en realidad lo que deberíamos hacer es usar como incentivo «la exportación» para hacer el novillo pesado.

El gasto en alimentación para hacer un novillo pesado a campo -teniendo en cuenta el costo oportunidad de la tierra- es mucho menor que el gasto de hacerlo encerrado -el kilogramo pastoril es de $ 0,25 por kilo contra los $ 0,60 por kilo encerrado (anexo 1)- y si a esto le sumamos la posibilidad de tener un precio superior al actual (por la integración exportación-mercado interno), con seguridad muchos productores volverían a la ganadería.

Ante este escenario de ganancias la única manera de hacer novillo a corral es mediante el pago de compensaciones al feedlotero. ¿Cuánto nos costará a los argentinos esta propuesta?

En el cuadro 2 vemos cuánto nos cuesta a los argentinos el engorde a corral.

El costo fiscal será de $ 1.679 millones, que es el resultado de la suma de lo que debe poner el Estado para engordar los novillos pesados a corral, que en el mejor de los escenarios -haciendo una recría barata a campo de 300 kilos- serán $ 779 millones, y lo que deja de recaudar si ese novillo se lo engordara a campo, que son $ 900 millones.



(*) Presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (CARTEZ). Ingeniero agrónomo