19 de octubre 2004 - 00:00

El Avenida con valiosa y entusiasta "Traviata"

María José Siri como Violeta y Norberto Fernández como Alfredo en la versión de «La Traviata» que presenta Juventus Lyrica en el Avenida.
María José Siri como Violeta y Norberto Fernández como Alfredo en la versión de «La Traviata» que presenta Juventus Lyrica en el Avenida.
«La Traviata», de G. Verdi. Con M. J. Siri, N. Fernández, A. Sewrjugin, L. Mauro, S. Bürgi, V. Thomas, F. Santiago, A. Di Nardo. Regie y Esc.: A. D'Anna. Vest.: M. Jaunarena. Ilum.: H. Parmigiani. Coro Juventus Lyrica, Dir.: H. Schvartzman. Prof. de la Orq. Est. del T. Colón, Dir.: A. Russo. (Teatro Avenida.)

De una encuesta entre abonados y simpatizantes de «Juventus Lyrica», la ópera pedida por abrumadora mayoría fue «La Traviata». Es la música romántica y dramática de Giuseppe Verdi lo que suma atractivo a la historia; su inspiración, su línea melódica de belleza incomparable fija cada acción y situación en la memoria afectiva, ya se trate de un brindis colectivo o la muerte de la protagonista en la flor de la juventud mientras afuera se escuchan los desbordes del Carnaval.

La orquesta, con músicos del Colón y a las órdenes del experimentado Antonio Russo, son un pilar fundamental en la representación; hicieron una labor digna de un teatro lírico de primera categoría. La juventud de los protagonistas despierta simpatía desde su aparición, y afortunadamente la avalan con talento y sobria actuación.

María José Siri
consagra su meteórica carrera con este papel,descontamos que lo mismo sucederá con Soledad de la Rosa que lo asume en el segundo elenco. Temperamento, sensibilidad y concentración trágica, sumadas a una voz perfectamente afinada y expresiva, Siri hace una Traviata creíble y conmovedora. Norberto Fernández es el tenor que cantó el papel de Alfredo, con su voz francamente y con recursos técnicos primarios, devino en una espontaneidad empujada por la música, claridad de dicción y actuación sobria, lo que es preferible a falsos clisés.

El difícil papel de su padre lo asumió Alejandro Sewrjugin en una elogiable labor, sobre todo porque en esta versión se abrieron los cortes tradicionales y se ofreció en su totalidad, con lo que tiene más texto que en las representaciones y grabaciones habituales. Excelente Lara Mauro como Flora, y de gran ternura Vanesa Thomas como Annina. Correctos Alejandro Di Nardo como el doctor Grenvil y Fernando Santiago como el Barón Douphol. El coro sonó afiatado; la régie es ingeniosa, con claroscuros de ensoñación y buscando el teatro íntimo hecho con tracción a sangre y amor a la lírica más que los oropeles con que se la suele adornar.

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