Con la llegada del otoño o tras una ola de calor intensa, muchas plantas de exterior cambian su aspecto de forma radical. Se secan, pierden hojas, se tornan marrones o parecen haber perdido todo signo de vida. Este cambio suele generar alarma en quienes las cuidan, que no siempre saben si están ante un ejemplar sin retorno o simplemente ante un proceso natural de descanso.
Estas son 5 formas de saber si tu planta de exterior está muerta o inactiva
Aunque luzcan secas, muchas plantas simplemente pueden estar en reposo y saber esto puede salvarlas de terminar en la basura.
-
Así podés iluminar tu jardín de noche con energía solar y ahorrar en tu factura de luz
-
Si seguís estos consejos ahora, para el verano vas a tener el jardín más hermoso

Estos son algunos tips para saber si tus plantas estan inactivas o no.
La realidad es que muchas plantas entran en un período de inactividad para protegerse del clima extremo. Este estado de reposo, conocido como latencia o dormancia, puede hacer que una planta parezca muerta, cuando en realidad está conservando energía para brotar con más fuerza cuando las condiciones mejoren. No todas las especies lo hacen de la misma manera, y por eso es fundamental conocer las señales que cada tipo de planta emite.
Aprender a leer esas señales no sólo evita errores comunes cómo desechar una planta sana, sino que también permite ajustar los cuidados. A veces necesitamos regar menos, no fertilizar o evitar podas innecesarias.
¿Qué significa que una planta esté inactiva?
Cuando una planta está inactiva, entra en un estado temporal de pausa fisiológica para conservar recursos durante condiciones adversas, como el frío extremo o la sequía. Durante este período, su crecimiento se detiene, las hojas pueden caer y la parte aérea puede secarse. Sin embargo, sus raíces y tejidos internos siguen vivos y listos para activarse cuando el entorno se torne favorable.
Este mecanismo de defensa es completamente natural y está presente en muchas especies, sobre todo en climas templados. En algunos casos, la inactividad es predecible y ocurre cada año durante el invierno; en otros, es una respuesta puntual ante el estrés ambiental. Entender esta dinámica nos permite saber cómo accionar ante los primeros signos de “muerte” aparente, y esperar antes de actuar.
Cómo saber si tu planta está inactiva
La clave para saber si una planta está inactiva o muerta está en observar con atención. La mayoría de las veces, hay pequeños indicios que muestran si todavía hay vida en su interior. Desde ramas flexibles hasta señales bajo la corteza, el cuerpo de la planta conserva pistas que, si se interpretan correctamente, pueden evitar una mala decisión.
Reconocer estos signos permite ajustar el cuidado y tener paciencia en vez de arrancar lo que todavía puede florecer. Además, tener conocimiento sobre el tipo específico de planta es esencial, ya que algunas entran en latencia cada año, mientras que otras jamás deberían parecer completamente secas si están sanas.
1. Ramas muertas y ramas quebradizas
Una forma simple de evaluar el estado de una planta es examinar sus ramas. Las que están completamente muertas se quiebran fácilmente, son secas y huecas. En cambio, las que están vivas, aunque no tengan hojas, suelen ser más flexibles, algo verdes por dentro y ofrecen cierta resistencia al intentar doblarlas.
Hacer una prueba con varias ramas de distintas partes de la planta puede darte una idea general de su salud. Si todas se quiebran sin esfuerzo, hay muchas probabilidades de que esté muerta. Pero si al menos algunas están blandas y no se rompen al tacto, es posible que siga viva aunque esté en reposo.
2. Revisar debajo de la corteza para ver si hay latencia
Otra técnica útil es raspar suavemente la corteza con la uña o un cuchillo. Si debajo se revela una capa verde clara, significa que la planta sigue viva y probablemente esté dormida. Si el interior es marrón oscuro o grisáceo, es señal de que ese tallo ya no tiene vida.
Este método, llamado “prueba del rasguño”, puede repetirse en distintas zonas del tallo para determinar qué partes siguen activas. Es importante no hacerlo con demasiada frecuencia, ya que dañar la corteza de forma repetida puede afectar la salud general de la planta.
3. Conocer el ciclo de latencia de su planta
Cada planta tiene un patrón particular de crecimiento y reposo. Algunas especies entran en latencia todos los años, como los arbustos, mientras que otras, como las tropicales, sólo lo hacen si las condiciones son extremas. Investigar el ciclo natural de tu planta puede ayudarte a anticipar estos cambios sin entrar en pánico.
Saber en qué época suele entrar en dormancia y cuánto dura ese estado también permite planificar mejor los cuidados. Por ejemplo, durante la inactividad conviene reducir el riego, no aplicar fertilizantes y evitar trasplantes, para no interferir con el proceso natural de descanso.
4. No te preocupes por las hierbas ornamentales
Muchas hierbas ornamentales, como las gramíneas, tienen un ciclo de vida marcado por cambios visuales extremos. Aunque durante el invierno o el verano parezcan pajosas y sin vida, lo más común es que estén simplemente en reposo y vuelvan a brotar cuando la estación cambie.
Estas plantas suelen morir de manera parcial, es decir que la parte aérea desaparece, pero sus rizomas subterráneos permanecen vivos. Lo ideal es esperar hasta la primavera para ver si rebrota antes de descartarla. Un corte basal a fines del invierno puede ayudar a estimular nuevos brotes.
5. Los árboles de hoja perenne deben seguir siendo verdes
A diferencia de los árboles caducifolios, los de hoja perenne no deberían mostrar signos de sequedad o pérdida total del follaje. Si las hojas cambian de color drásticamente, se caen en grandes cantidades o las ramas se ven quebradizas, puede que haya un problema más serio que una simple dormancia.
En estos casos, lo recomendable es revisar si hay signos de plagas, daño por heladas o enfermedades. También puede ser útil comparar con árboles similares cercanos, si el resto sigue verde y sólo el tuyo presenta síntomas de decaimiento, es posible que esté muriendo.
- Temas
- Jardinería
Dejá tu comentario