Quiénes son los "Lobos Grises", la organización de extrema derecha turca que preocupa a Europa

Distintos países como Austria y Francia prohibieron el típico saludo con la mano de esta organización. El debate por la agrupación traspasó las fronteras europeas.

El gesto del futbolista turco puso en el foco la expansión de la organización de extrema derecha.

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En los últimos meses, una gran polémica se generó durante la Eurocopa 2024 cuando el jugador de la selección turca, Merih Demiral, marcó un gol y festejó realizando un gesto particular con la mano que emuló la cabeza de un lobo. Posteriormente, la UEFA suspendió al futbolista por dos partidos debido a que el festejo representa a los Lobos Grises, un movimiento político de extrema derecha en Turquía.

La agrupación está atrayendo cada vez más atención fuera de las fronteras turcas, al igual que lo hace el típico gesto que realizan con la mano. El saludo y la organización comienzan a dividir las aguas y países como Austria y Francia ya adoptaron posturas fuertes ante el mismo, prohibiéndolo y vetando todas las actividades de la organización.

Los Lobos Grises en Alemania

Lo sucedido con el jugador de la selección turca generó un fuerte revuelo en Europa. La ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, utilizó sus redes sociales para criticar la manera de festejar de Demiral: "Los símbolos de los extremistas de derecha turcos no tienen cabida en nuestros estadios”.

Ante esto, Turquía reaccionó y acusó al gobierno de Berlín de "xenofobia" por sus críticas al gesto del lobo. En esta línea, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, salió en defensa del deportista:“¿Alguien se ha cuestionado por qué la camiseta del equipo nacional de Alemania tiene un águila, o la camiseta francesa un gallo? Merih (Demiral) manifestó su emoción con ese gesto”.

Los inicios del gesto se remontan a la década de 1990.

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Ni el saludo ni la organización están proscritos actualmente en Alemania. La investigadora superior en Seguridad de Medio Oriente del Instituto de Servicios Reales Unidos, Burcu Ozcelik, detalló: “Cuando hablamos del movimiento de los Lobos Grises en Alemania, a lo que realmente nos referimos es a un ecosistema mucho más amplio de clubes, de cafés, de asociaciones comunitarias locales”.

Actualmente, la oficina federal de Alemania para la protección de la Constitución (BfV) clasifica a los Lobos Grises como un grupo extremista de derecha. Según el seguimiento que realiza la institución, la misma cuenta con entre 18.500 y 20.000 miembros en ese país.

Los turcos componen el principal grupo étnico minoritario en Alemania, con un total aproximado de tres millones de ciudadanos turcos y alemanes de ascendencia turca. La población total de Alemania es de unos 84 millones. “Entre la mayoría de la diáspora turca en Europa, las tendencias y los símbolos nacionalistas son bastante fuertes”, comenta el periodista Kemal Can, experto en nacionalismo turco.

La violencia de Los Lobos Grises

Desde la década de los 70, Los Lobos Grises fueron acusados de varios actos de violencia tanto en Turquía como en Europa. Uno de los casos de más resonantes es el que involucró a la organización con el intento de asesinato contra el papa Juan Pablo II en 1981 por Mehmet Ali Agca, miembro de la organización. En esa ocasión, el Sumo Pontífice de la Iglesia Católica fue gravemente herido de bala en el ataque.

Mehmet Ali Agca y Juan Pablo II reunidos en la cárcel luego del intento de asesianto.

Los Lobos Grises son vinculados frecuentemente con el “estado turco profundo”, una supuesta red de poderosas y antidemocráticas coaliciones dentro de las estructuras políticas y burocráticas de Turquía. En la actualidad, la organización fue vinculada con enfrentamientos callejeros en diversas poblaciones europeas.

A pesar de la polémica que despiertan - y de sus hipotéticos vínculos con acciones violentas - los Lobos Grises no son un grupo prohibido en Alemania. Sin embargo, la situación cambia para otros países: en Austria se les prohibió hacer el gesto del lobo en 2019, y Francia vetó cualquier actividad de la agrupación en 2020.Por su parte, en 2021, el Parlamento Europeo recomendó que los Lobos Grises fueran incluidos en la lista de terroristas de la UE.

La influencia de la agrupación va más allá de las fronteras europeas. En Azerbaiyán, un país con estrechos vínculos históricos y lingüísticos con Turquía, el grupo intentó capitalizar con el fortalecimiento del nacionalismo es ese país tras el colapso de la Unión Soviética en 1991.

“Los Lobos Grises causaron polémica en Azerbaiyán después de su supuesta participación en un intento de golpe en 1995 contra Heydar Aliyev, el padre del actual presidente Ilham Aliyev”, señaló Könül Khalilova, editora de BBC News Azerbaijani.

Su influencia también llegó hasta Kazajistán país que, en 2005, también declaró ilegal a la organización y la clasificó como un “grupo terrorista”. Ante esto, Turquía afirma que no existe un movimiento llamado los Lobos Grises y que prohibir el saludo del lobo es inaceptable.

El lobo como símbolo

El símbolo del lobo genera revuelo en la comunidad europea y su prohibición comienza a ser efectiva en algunos países. El profesor Ahmet Tasgil del Departamento de Lengua y Literatura Turca de la Universidad Yeditepe en Estambul detalló: “El símbolo del lobo es uno de los símbolos más importantes para los turcos”.

“Todas las tribus túrquicas que vivían en Asia Central usaron ese símbolo durante el cuarto y quinto siglo”, recordó. Además, el profesor también destacó distintas fuentes, de los siglos XII y XIII, que hacen a alusión a leyendas armenias, siríacas y otras del Medio Oriente, que explican como los turcos, cuando llegaron a Anatolia, lo hicieron siguiendo un lobo: “Para los turcos, el lobo es una figura guía, que representa sabiduría”, sentenció el profesor.

En el período otomano, a finales del siglo XIX, el símbolo del lobo se utilizó de diversas formas. En los inicios de la Turquía moderna, este animal comenzó a aparecer en billetes y estampillas.

Sin embargo la historia del saludo del lobo se remonta a comienzos de la década de 1990, en Azeirbayán. Fue allí que, en medio de protestas multitudinarias, comenzó a surgir el gesto con las manos.

“Estas protestas contribuyeron a la independencia del país y al colapso de la Unión Soviética. Ese gesto, aunque no fuera utilizado ampliamente”, concluyó Tasgil.