Desde el Gobierno iniciaron gestiones para solucionar un problema creciente de la población de carpinchos en distintas zonas de Tigre. La situación afecta especialmente las costas del Río de la Plata y del río Luján, las islas de San Fernando, el Delta y diversos clubes náuticos ubicados en localidades como San Isidro, San Fernando y Olivos.
El Gobierno analiza medidas para la superpoblación de carpinchos
Las gestiones son impulsadas por la secretaria de Turismo, Ambiente y Deportes. Según datos no oficiales, son más de 3.000 animales los que habitan en la Nordelta y distintas zonas de Tigre.
-
Milei perdió el control de la agenda del Congreso y dejó aliados en el camino
-
Kicillof apuntó contra Milei tras el revés legislativo: "Se le puso un correctivo democrático"

El Gobierno analiza cómo abordar el problea de los carpinchos en la zona norte bonaerense.
En este sentido, la secretaria de Turismo, Ambiente y Deportes, conducida por Daniel Scioli, puso el foco en la sobrepoblación de carpinchos. Se cree que en las áreas afectadas viven más de 3.000 ejemplares de esta especie.
El Gobierno busca una solución para los carpinchos
Tras mantener reuniones con el subsecretario de Ambiente, Fernando Brom, Scioli explicó: “Después de conversar con especialistas, nuestra idea es poner en marcha un programa de traslocación, llevarlos a un hábitat donde puedan alimentarse con pasto, relocalizarlos en una isla, que idealmente puede ser en San Fernando o en Tigre, que funcione como una especie de santuario”.
El funcionario también destacó la importancia de involucrar a la comunidad en el proceso. “A su vez, y entendiendo que hay personas familiarizadas con esta especie, estamos pensando en que puedan hacerle un seguimiento, vean que se los va a trasladar a un lugar mejor, y que puedan visitarlos. Este procedimiento se hará en acuerdo con las familias”, agregó.
En la actualidad, no existen cifras oficiales de cuantos ejemplares de carpincho habitan la zona. En Nordelta, en el partido de Tigre, el veterinario Adrián Petta intervino en múltiples casos relacionados con estos animales, desde accidentes de tránsito hasta enfermedades transmisibles a humanos, mordeduras - algunas de gravedad - y ataques a mascotas.
En las últimas semanas, desde la secretaria de Ambiente también llevaron adelante las gestiones para que Kenya - el último elefante en cautiverio que habitaba Argentina - fuera trasladada desde el Eco Parque de Mendoza, donde vivió durante cuatro décadas, hasta el santuario de Mato Grosso. El recorrido, de 3.600 kilómetros, se inició el 4 de julio y concluyó este lunes, tras cruzar el paso fronterizo Puerto Iguazú - Foz do Iguazú.
El problema de los carpinchos y porque no pueden ser mascotas
Los carpinchos, roedores autóctonos de Sudamérica, son comunes en el centro y norte de la Argentina, especialmente en la región de la Mesopotamia. Aunque desde hace tiempo son noticia por su presencia en countries y barrios cerrados del norte bonaerense, ahora también se convirtieron en tendencia global gracias a su presencia en redes sociales.
Su carácter sociable y amistoso los volvió un fenómeno viral en todo el mundo, donde se los conoce como “capibaras”. Sin embargo, pese a su apariencia inofensiva, no son animales aptos para la domesticación, y el intento de hacerlo puede acarrear serios problemas.
El llamado “mascotismo” —la práctica de extraer un animal silvestre de su entorno para tenerlo como mascota— incluye también el hecho de encontrar un ejemplar en una zona urbana y asumir que necesita ser adoptado. En estos casos, la recomendación de especialistas es contactar a las autoridades correspondientes para que evalúen su estado y, si es posible, lo devuelvan a su hábitat natural.
Existen razones claras por las cuales los carpinchos no deben ser domesticados:
- Comportamiento social: son animales gregarios que viven en grupos familiares de hasta 20 integrantes, en zonas cercanas a ríos o lagos. Aunque pueden convivir con otras especies, mantenerlos en casas o jaulas atenta contra su bienestar, ya que requieren espacio amplio y condiciones adecuadas.
- Dependencia del agua: grandes aficionados a nadar, necesitan entornos con acceso permanente a cuerpos de agua. Su cautiverio exige infraestructura difícil de replicar en un ámbito doméstico.
- Valor ecológico: su dieta basada en plantas acuáticas contribuye al equilibrio de los ecosistemas donde habitan. Al mantener la vegetación bajo control, colaboran en la limpieza natural de ríos y lagunas, beneficiando a otras especies.
Aunque la convivencia entre humanos y carpinchos se ha vuelto más frecuente por el avance urbano sobre sus hábitats, es fundamental entender que se trata de fauna silvestre, con necesidades que no pueden ser satisfechas en un entorno doméstico.
Dejá tu comentario