"Las denuncias buscan presionar a los senadores que votan con el Gobierno para que dejen de hacerlo"

Miguel Ángel Pichetto

El jefe de la bancada de senadores del Frente para la Victoria, Miguel Angel Pichetto, denunció la existencia de una campaña para "estigmatizar" a los legisladores que votan a favor de los proyectos del gobierno y, en forma irónica, dijo que en el país "está en marcha la empresa Demoliciones (Elisa) Carrió S.A."

"Hoy hay en marcha una empresa en Argentina: Demoliciones Carrió S.A., que está en pleno funcionamiento y con el aval de muchos medios de comunicación", afirmó el legislador rionegrino en declaraciones radiales.

Al ser consultado sobre si atribuye a Carrió la conducción de la oposición tanto en el Senado como en Diputados, Pichetto respondió "absolutamente" y consideró que la dirigente "ha impregnado con su lógica el accionar del conjunto de la Coalición Cívica y ha colocado al radicalismo en un plano de subordinación".

Asimismo, denunció que "en la última semana comenzó una campaña para estigmatizar a aquellos (legisladores) que votan con el gobierno, diciendo que los compraron y son corruptos, y que los que votan en contra son patriotas y les importa al país".

Para el jefe del bloque oficialista en la Cámara alta, el inicio de esta campaña se dio "en el templo de la (Sociedad) Rural" con el discurso que pronunció el presidente de la entidad agropecuaria, Hugo Biolcati, al que calificó de "fracturante", y lamentó que no haya tenido un mensaje de "esperanza y de reconstrucción del diálogo como el que el gobierno está intentando llevar adelante".

También criticó a la embajadora de los Estados Unidos, Vilma Martínez, quien "no cuidó el detalle formal de su ubicación y su rol, subida a la tribuna de una oposición salvaje" durante la ceremonia de inauguración de la muestra, el pasado sábado.

Por otra parte, fue consultado sobre la denuncia que hizo ayer pública el senador santiagueño Emilio Rached, quien contó que -durante el debate en la Cámara Alta de la resolución 125- recibió ofertas anónimas por mensaje de texto para votar en contra.

"Lo que no dijo el senador es de donde provino ese mensaje porque los sectores económicos y de la empresa estuvieron con mucha actividad en el ámbito parlamentario. Habría que haber investigado rápidamente y todavía estamos a tiempo", dijo el legislador.

En tanto, defendió el accionar de senadores que tienen "una mirada independiente" como Roxana Latorre, María José Bongiorno o Adriana Bortolozzi.

"El objetivo es que estos senadores, que en algunas posiciones tuvieron posturas a favor del gobierno, no las tengan más y perdamos el control del Senado y puedan disponer de las locuras que están planteando", planteó.

Pichetto dijo además que el hecho de que "el gobierno ayude o privilegie una relación con un estado provincial y que apueste a generar obra pública en determinados lugares, no puede ser calificado de corrupción".

Finalmente, sobre la pretensión de la oposición de fijar el 82 por ciento móvil en las jubilaciones, el legislador rionegrino sostuvo que "buscan dinamitar el sistema previsional que con mucho trabajo desde 2003 a la fecha se ha ido reconstruyendo". Y agregó que la oposición tiene una agenda parlamentaria "demencial" que "quiere dejar sin financiamiento al Gobierno".


El caso

Ayer, el senador opositor Emilio Rached afirmó que antes de una votación en la Cámara alta recibió un mensaje anónimo en el que lo invitaban a "pedir" lo que "quisiera".

"Recibí un mensaje de texto anónimo que decía `pedí lo que quieras`", afirmó el senador radical por Santiago del Estero.

Las declaraciones de Rached añadieron un elemento más a la polémica que se generó en el ámbito político por afirmaciones de la oposición sobre la forma en que el oficialismo negociaría votos en la Cámara alta.

El diputado peronista disidente Felipe Solá había señalado que "cuando el Gobierno tiene dificultades, sale de shopping por el Senado".

Y la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, denunció por su parte que "el Gobierno compra senadores".

En tanto, Cabanchik evaluó que "la agenda parlamentaria está siendo marcada por la oposición".
Pero que ese sector es "heterogéneo", por lo que no puede imponerse siempre en las votaciones, ni "trasladar a oferta electoral para una elección presidencial".


Críticas

En tanto, la oposición salió a quejarse de que el oficialismo está "atrincherado en el Senado", mientras fogonea "denuncias y sospechas" sobre la negociación de votos en la Cámara alta.

"El Gobierno tiene una estrategia perversa que consiste en atrincherarse en el Senado y en medio de denuncias y sospechas", se quejó el diputado opositor Eduardo Amadeo.

El dirigente del peronismo disidente sostuvo que en el Gobierno piensan: "en la Cámara de Diputados trabajan como burros, cuando llegan acá cerramos el embudo y no pasan los proyectos". 


Por su parte, el senador por Proyecto Buenos Aires Federal, Samuel Cabanchik, calificó de "ofensivas y torpes" las acusaciones sobre irregularidades ante las votaciones clave de la Cámara alta.

"Son expresiones ofensivas y torpes que hacen mal a la democracia", enfatizó Cabanchik, al repudiar acusaciones contra el Gobierno por realizar ofrecimientos indebidos a senadores.
El legislador confirmó en declaraciones radiales que presentará "un proyecto de declaración para repudiar y en todo caso investigar este tipo de declaraciones".

"No se puede hablar de esa manera públicamente. No debe hacérselo en una institución que tantos años estuvo reñida con la democracia", evaluó.

Cabanchik pidió que "si se mantienen" las acusaciones sobre presuntos sobornos "que se las investigue realmente, y si no que se las retire".