El diputado nacional del PRO, Mauricio Macri, se dedicó ayer a navegar por las sucias, contaminadas y perniciosas aguas del Riachuelo, cuya limpieza es uno de los temas de la campaña porteña del legislador.
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Macri reclamó la limpieza de ese curso de agua a las autoridades nacionales, bonaerenses y de la Ciudad.
«Es tiempo de que los gobiernos nacional, provincial y municipales comiencen a ocuparse de revertir la situación. Hay que atacar todos los puntos de contaminación», afirmó el empresario.
Como el Mediterráneo
Macri consideró que «el Riachuelo podría tener aguas como las del Mediterráneo si hiciéramos las cosas bien. En Inglaterra se logró con el río Támesis, en cambio aquí se pidió un crédito para tratar el tema y una vez más la plata se gastó en consultoras.
Obviamente, el crédito se perdió y encima pagamos multa por la no utilización», subrayó.
Una Asociación de Vecinos de La Boca viene insistiendo con las enfermedades que causa el lugar contaminado en los niños, mientras que la Auditoría General de la Nación acaba de hacer un informe en ese sentido.
Acompañaron a Macri en el recorrido el vicepresidente primero de CPC, Horacio Rodríguez Larreta, Carlos Tramutola, encargado de Medio Ambiente del PRO, la diputada nacional Paula Bertol y el legislador Marcelo Godoy.
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