El gobierno argentino pidió ayer a los países del continente reafirmar su respaldo al reclamo argentino por las islas Malvinas y la manifiesta « voluntad negociadora» del gobierno nacional, tras afirmar por boca del canciller Jorge Taiana que el Reino Unido «desoyó los sucesivos llamamientos de los foros internacionales».
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Al hablar ante la 36ª Asamblea General de la OEA, reunida en República Dominicana, el funcionario entendió que «la falta de progreso prolongada debe ser motivo de preocupación» para el organismo y su perspectiva del proceso de descolonización. La Asamblea aprobó minutos más tarde por aclamación de todos sus miembros una nueva resoluciónque reitera la invocación a la Argentina y el Reino Unido a retomar las negociaciones de soberanía sobre las islas.
La declaración la había presentado la delegación de Brasil, encabezada por su canciller, Celso Amorim. Tras los considerandos de los antecedentes de la cuestión Malvinas, la resolución « reafirma la necesidad de que los gobiernos de la Argentina y el Reino Unido inicien cuanto antes las negociaciones sobre la disputa de soberanía» y expresa la «satisfacción por la voluntad del gobierno argentino de continuar explorando la solución pacífica de la controversia».
Desde la asunción del actual gobierno las relaciones con Gran Bretaña han sufrido un enfriamiento que un ex embajador de ese país calificó hace un año, antes de dejar la misión, como las peores desde la reapertura de relaciones en 1990, tras los llamados acuerdos de Madrid. En ese protocolo que había comenzado a negociarse bajo el gobierno de Raúl Alfonsín la cuestión de la soberanía en Malvinas fue puesta en lo que se llamó el «paraguas de soberanía», una figura por la cual se postergaba ese debate hasta alcanzar un nuevo plano que hoy parece más lejano que entonces.
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