6 de junio 2007 - 00:00

Telerman avanza con consulta por Policía

Jorge Telerman
Jorge Telerman
El procurador de la Ciudad de Buenos Aires, Agustín Zbar, llevó ayer al Tribunal Superior de Justicia el modelo de la boleta que eventualmente se utilizaría para la consulta popular que Jorge Telerman convocó para el 24 de junio, en el mismo cuarto oscuro donde se disputará la segunda ronda electoral porteña.

En principio, el Gobierno de la Ciudad, ante la derrota electoral del mandatario, había deslizado la posibilidad de anular esa convocatoria, realizada para que los vecinos se pronuncien por sí o por no a que el distrito cuente con policía en materia contravencional. Pero la idea del entorno que hoy asiste a Telerman en ciertas decisiones es que esa consulta es parte de «una política de Estado» y que no deberían abandonarla.

Para diagramar esa policía porteña, Telerman nombró días atrás al radical Ricardo Gil Lavedra, con la intención de tener para fin de año el desarrollo de cómo se instrumentaría esa fuerza de seguridad, que no tendría las mismas competencias que la Policía Federal.

Inclusive está previsto que cada vecino de la Capital Federal reciba una carta en su domicilio explicando en qué consiste la consulta, cómo y cuándo se realizará. La presentación de ayer ante la corte porteña da muestras del debate interno que en ese sentido se daba ayer en las oficinas del palacio municipal.

Hoy, tras una reunión de gabinete, Telerman ratificaría la convocatoria a esa consulta, que será voluntaria para los votantes que al concurrir a optar por Mauricio Macri o Daniel Filmus también podrán poner en el sobre de los comicios la boleta que diga «sí» o la que diga «no» al tema policial.

  • Transición

    En cambio Telerman, quien dijo que ya comienza la transición hacia quien resulte su sucesor, ha decidido anular otras cuestiones.

    Por ejemplo, esperará al 24 de junio para conocer al ganador para consultarle sobre la adjudicación de la licitación para renovar el mobiliario urbano en el distrito (carteles publicitarios, señales, etc.), para la cual ya se abrieron, meses atrás, los sobres con las primeras ofertas. Ese concurso se viene demorando y el jefe porteño confió que decidirá sobre el mismo una vez que consulte a su reemplazante.

    Tampoco se pondrá en marcha la construcción de playas de estacionamiento subterráneas, un proyecto que lleva más de diez años y que para realizarse requeriría ahora de una nueva norma. Es decir, Telerman, hasta que traspase el mando, no quiere comenzar ninguna obra nueva en la Ciudad, sólo se seguirán las que están en curso.

    Por otra parte, el jefe de Gobierno es alentado por un grupo de sus seguidores dentro del gabinete para que no pronuncie posición con respecto a quién votar en el ballottage. Ya algunos ministros y funcionarios de diverso rango salieron a pronunciarse en ese sentido, por eso ayer el subsecretario Horacio Lenz, que anima una de las agrupaciones de la coalición de Telerman, envió un comunicado en el que se refiere a que lo mejor sería que el jefe porteño fuera «prescindente».
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