Tomada aseguró que el proyecto del PRO para tomar los subtes "altera el derecho de huelga"
-
Mondino aseguró que los dichos de Milei ''no afectan a las relaciones entre los países''
-
Capital Humano volvió a comprar alimentos para comedores, tras fuertes cruces con organizaciones sociales
Pero el kirchnerismo ya está dividido con respecto a la norma. Ámbito Financiero reveló que un sector no quiere admitir la declaración de emergencia que pide Macri y que le concedería superpoderes durante cinco años. Tampoco está de acuerdo con declarar el servicio como "esencial", lo cual obligaría a los empleados a mantenerlo aun cuando estén realizando una protesta. Menos algunos kirchneristas (aún no se pronunció formalmente el bloque que conduce Juan Cabandié) estarán dispuestos a votar un aumento de impuestos como propone Macri, a las naftas y a las patentes, y una suba de peaje para financiar el servicio.
Para Cabandié, Macri busca "configurar un Estado bobo". Según dijo el legislador porteño por el Frente para la Victoria, "lo que hace Macri es configurar un Estado bobo: busca recaudar más pero no ejecuta ni gasta lo que tiene".
Cabandié reveló que para los diputados de su bloque, según los detalles que trascendieron de la iniciativa del PRO, el proyecto sería "inconstitucional".
En este sentido, criticó que la gestión del PRO busque "sostener el subte con los usuarios" y cuestionó el hecho de que "se le quiere tocar el bolsillo a los usuarios cuando en realidad el Ejecutivo porteño tiene los recursos".
Por otro lado, en diálogo con la agencia oficial Télam, sostuvo que el bloque del Frente para la Victoria en la Legislatura "obviamente defenderá el derecho laboral" de los trabajadores del subte y afirmó que "el derecho a huelga es un derecho legítimo de todos los trabajadores".
Por Radio Continental, el diputado del PRO Martín Ocampo explicó que "de aprobarse la normativa, caerá el actual contrato de concesión que la empresa Metrovías tiene para explotar el servicio".
Luego, la compañía "tendrá tres meses para renegociar el contrato. Con nosotros, Metrovías no va a continuar el contrato que actualmente tiene. Vamos a iniciar un proceso de conversación en los primeros 90 días", puntualizó Ocampo.
Llegado el caso de que no se logre acordar una nueva concesión, el Gobierno porteño tendrá la posibilidad de "contratar otro operador" o prestar el servicio "a través de una sociedad anónima", detalló el legislador.
Dejá tu comentario