Los Pumas consiguen el primer objetivo y sueñan con ir por más
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La casi perfecta armonía que demostraron Los Pumas fue la clave para vencer a un equipo que en ningún momento supo tomar el mando del encuentro, a pesar de que le convirtió los primeros dos tries en este Mundial.
Argentina ganó siguiendo al pie de la letra un planteo táctico y estratégico muy bien pensado y ejecutado: en todos los ataques apuntó a Ronan O'Gara, el más débil en defensa, y neutralizó a sus armas Brian O'Driscoll y Gordon D'Arcy.
Irlanda nunca dispuso de pelotas claras para lanzar ataques certeros y las pocas que tuvo fueron pobres intentos que morían en tackles pumas.
Otra vez quedó marcado el gran poderío del pack argentino superando a sus rivales en todas las formaciones, complicando el line out, la plataforma de ataque clave del rival.
Fue muy notable la mejora del maul argentino, ya que fue clave para ganar terreno cuando no se podía jugar abierto y el uso del pie no daba resultados.
La vuelta de Longo aportó más variantes a un line que sigue fallando, pero que cada partido se va notando más firme, y su voz de mando se hizo notar.
Los hermanos Fernández Lobbe fueron topadoras, la primera línea parecía la tercera corriendo a lo largo y ancho del campo, chocando, avanzando y recuperando pelotas.
Un partido aparte jugó Felipe Contepomi, quien en alguna jugada arriesgó de más, empecinado sobre todo por su rivalidad con el apertura irlandés O'Hara.
Mucho se habló los días previos del árbitro neocelandés, Paul Honis, quien ya había refereado a Los Pumas en otro Mundial y no dejó buenos recuerdos por sus controvertidos fallos, en contra del conjunto argentino. Sin embargo, la disciplina táctica y el fair play con que se desempeñó el equipo de Loffreda no le dejó mucho margen para que el diablo metiera la cola. Sin embargo, ante cualquier duda, siempre la balanza se inclinó hacia Irlanda. Aun así no les sirvió de mucho a los irlandeses. Simplemente porque Loffreda encontró los fuertes del rival para transformarlos en sus debilidades y transmitirlo para que sus jugadores lograran una victoria muy esperada, desde hacía cuatro años. En el horizonte se asoma Escocia, un rival duro, pero que sin dudas es muy inferior a los poderosos All Blacks de Nueva Zelanda, que deberán medir fuerzas con Francia.
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