Montevideo (de nuestra agencia) - El presidente de Uruguay, Jorge Batlle, le aceptó ayer la renuncia al ministro de Economía, Alberto Bensión, quien dimitió después de que el directorio del Partido Nacional (Blanco), socio de la coalición de gobierno presionara públicamente en ese sentido.
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Tras una serie de reuniones al más alto nivel, de las que participó inclusive el primer mandatario, Bensión presentó su renuncia y según se especulaba al cierre de esta edición, sería sustituido por el actual senador Alejandro Atchugarry, uno de los hombres más influyentes dentro del grupo de parlamentarios colorados. Otros nombres, incluyendo al economista Ernesto Talvi, eran mencionados dentro de una reestructuración del equipo económico, aunque todos señalaban que la decisión final «está en manos de Batlle». Sin embargo, el presidente aún no hizo declaraciones.
El ex presidente Luis A. Lacalle lanzó al mediodía un verdadero ultimátum al gobierno, afirmando que es necesario un cambio en la conducción económica, incluyendo al ministro Bensión, para que «se abra una nueva etapa en la vida política y económica del país». Los ex presidentes Julio Sanguinetti y Lacalle se habían reunido el viernes con Batlle para buscar una salida a la difícil situación porque atraviesa el país y a la salida del encuentro ratificaron el apoyo al gobierno y el esfuerzo que el Estado viene haciendo para respaldar al sector financiero. Batlle mantuvo en la mañana de ayer una extensa reunión con los integrantes del equipo económico y con Atchugarry, analizando relevos, toda la situación económica actual y en especial, la negociación para el proyecto de Rendición de Cuentas que se encuentra en el Parlamento.
• Reemplazos
En tanto, también se definieron cambios en el directorio del Banco Central del Uruguay (BCU). Ya quedaron ordenados el alejamiento del presidente César Rodríguez Batlle, de la vicepresidenta Eva Holz y de la directora Rosario Mederos, que serán sustituidos en la presidencia por el actual representante de Uruguay ante los organismos internacionales, Carlos Steneri, en la vicepresidencia por un abogado del sector del ex presidente Julio Sanguinetti (se mencionan Julián Moreno o Carlos Balsa) y un representante del Partido Nacional.
La semana anterior un pedido de censura a Bensión, presentado en el Senado por el opositor Frente Amplio, no contó con el apoyo del Partido Nacional, pero surgieron desde los socios de la coalición fuertes críticas a la conducción económica.
• Recesión
En los últimos años la economía uruguaya ha caído en una fase recesiva, que ha impactado en el nivel de vida de la población, aumentando los márgenes de descontento y las críticas a la política implementada por el gobierno. El nivel de actividad cayó 10,1% en el primer trimestre de 2002, respecto a igual período de 2001. El Producto Bruto Interno (PBI) uruguayo había caído 3,1% en 2001, 1,1%. en 2000 y 3,4% en 1999.
Varios factores se juntaron para explicar la caída del nivel de actividad. Por un lado la crisis cambiaria de Brasil de enero de 1999, que impactó además fuerte en la economía de la Argentina, lo que redujo la demanda de los dos socios más importantes de Uruguay. A esto se sumó la baja de los precios internacionales de las principales materias primas que exporta el país (carne, lana y cereales), con una sequía que afectó al sector agropecuario a partir del segundo semestre de 2000. También, la aparición de la aftosa en abril de 2001 y el agravamiento de la crisis argentina a fines del mismo año, fueron factores que colaboraron con la caída del nivel de actividad.
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