Tiempo atrás el Gobierno dio a conocer que está trabajando en una nueva reglamentación de la Ley 27.350, más conocida como Ley de uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados, y con esta iniciativa se regulará el autocultivo, la venta de aceites en farmacias, la producción estatal y también se ampliarían las patologías que podrían ser tratadas con el producto. Actualmente solo se contempla para la epilepsia refractaria. En este marco aún quedan afuera las empresas interesadas en invertir en el sector y que incluso están impulsando proyectos de investigación -con organismos públicos como el INTA- para potenciar a una actividad que podría convertirse en motor económico en el corto plazo, pensando no solo abastecer el mercado interno sino también exportar un producto que cotiza en promedio alrededor de u$s3.000 el kilo.
Cannabis: toma forma primer parque industrial y Cámara suma más empresas del sector
Días atrás firmaron un convenio con el municipio de San Pedro para poner en marcha un parque industrial exclusivo para la actividad.
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Pablo Fazio es el presidente de la Cámara Argentina del Cannabis (ArgenCann) y a pesar de la falta de un marco legal óptimo, acaba de firmar un convenio con el municipio de San Pedro para instalar el primer parque industrial de la Argentina dedicado exclusivamente a la producción, industrialización e investigación de este cultivo que tiene una larga historia en el suelo argentino. Así es, el cáñamo una variedad de la planta de cannabis con menor concentración de THC, comenzó a producirse localmente en la época de la Colonia, o más bien alrededor del 1800, porque tiene usos de tipo industrial como, por ejemplo, para la producción de fibras textiles. Luego, alrededor de 1960, llegó la prohibición prácticamente mundial por la popularización de la marihuana.
“Es necesario plantear un debate serio respecto a la producción de cannabis local. Entendemos como un muy buen avance la nueva regulación del ministerio de Salud de la Nación, que esperamos saldrá en las próximas semanas, y en este marco aguardamos que el sector privado también sea parte. No sería lógico que el Estado tome el rol productor para abastecer el mercado, cuando en realidad tiene temas mucho más urgentes que atender en la pospandemia. Con este objetivo se formó la ArgenCann, para acercar una agenda de trabajo al Gobierno pensando en el sector como motor económico, que puede desarrollarse en diversas provincias, que puede generar empleo y hasta exportar a valores de mercado muy tentadores en la generación de divisas”, contó Pablo Fazio, en diálogo con Ámbito.
Según un estudio de la Asociación Colombiana de Industrias de Cannabis (Asocolcanna), una hectárea de cannabis genera alrededor de 16 empleos directos, un dato a tener en cuenta en el impacto que puede tener el desarrollo privado en el sector, porque, por ejemplo, la vitivinicultura local genera alrededor de 1,4 empleos por hectárea, mientras que la soja genera un empleo cada 50 hectáreas.
Justamente la cámara empresarial que comanda Fazio sigue de cerca el modelo colombiano porque es uno de los que más está creciendo en la región, abasteciendo al gigante mercado de Brasil y que en el último tiempo recibió inversiones por más de u$s400 millones.
“Siendo Argentina un país agroindustrial, es una oportunidad que no hay que dejarla pasar, por eso desde el sector privado no detenemos la marcha y esperamos pronto un despegue fenomenal de toda la cadena. No solo con la producción de aceites medicinal sino también con el desarrollo de tecnologías y otros usos para el cultivo que van desde la cosmética, pasando por la fabricación de plásticos, hasta la industria textil”, cerró Fazio.
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