El incremento de la tasa interés que puso en marcha la semana pasada el Banco Central, como parte de las medidas para contener la suba del dólar paralelo, tuvo como efecto colateral un fuerte ajuste del costo de las cuotas de la moratoria pyme.
El aumento de la tasa del BCRA elevó las cuotas de la moratoria pyme
El plan de pago vino ajustando hasta abril al 1,5% por mes, pero desde ahora pasó a actualizar por la tasa Badlar que es del 7,3% mensual.
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Desde abril, los pagos mensuales se actualizan a tasa Badlar, que es la que aplican los bancos a los plazos fijo mayoristas. Actualmente es del 7,3% mensual y hasta ahora las pymes y clubes de barrio que habían entrado a plan de pagos abonaban con un ajuste de solo el 1,5%.
Frente a ello, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) envió una nota al ministro de Economía, Sergio Massa, en la que le pide modificar el índice de actualización mediante un DNU y advierte sobre “los graves riesgos que corren las PyMEs argentinas tras el aumento de las cuotas de los planes”.
En esta línea, la CAC explicó que el cálculo al que se someten las deudas desde el cuarto mes del año “son excesivos para el sostenimiento” de las empresas.
“Tras los recientes ajustes dispuestos por el Banco Central, la tasa Badlar vigente es del 87,5% nominal anual, implicando una tasa mensual nominal del 7,3%”, plantea la entidad en la nota enviada al titular del Palacio de Hacienda.
El texto agrega que “el hecho de multiplicar la tasa por 4,5, al ser aplicado al saldo de capital adeudado, determinó que las cuotas se triplicaran o cuadruplicaran de un período al siguiente, haciéndose en muchos casos impagables para las micro y pequeñas empresas”.
Asimismo, la entidad advirtió que “el incumplimiento sobreviniente ocasionará a breve plazo la caducidad de los planes de pago y sujetará a estas empresas a la aplicación de medidas cautelares por la AFIP en cumplimiento de sus obligaciones legales, pero con grave riesgo para la continuidad empresaria y el empleo de gran cantidad de trabajadores formales, agravando el traslado al sector informal de la economía”.
La CAC afirma que buena parte de las “520 mil PyMEs argentinas —que representan al 98% del total de las empresas del país— debieron recurrir durante la pandemia a la Ley de Alivio Fiscal para continuar en pie.
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