FMI busca apertura gradual del 'corralito'

El Fondo Monetario Internacional no avalará una apertura total para el «corralito», como proponen los principales funcionarios del Banco Central. Así se lo adelantó el flamante director del Hemisferio Occidental del organismo, Anoop Singh, al titular del Central, Aldo Pignanelli, en ocasión de la visita de este último a Washington.

«El FMI -explicó Singh- comparte la idea de que mientras siga el 'corralito' será imposible recuperar la confianza en el sistema bancario. Pero hay que ser muy precavido para evitar una nueva disparada del dólar.»

Esta postura del organismo seguramente influirá -y mucho- en la conclusión que saquen los enviados internacionales al país, cuya misión fundamental es determinar cuál será el futuro de la política monetaria de la Argentina.

Se trata de una posición casi intermedia entre dos extremos: el de Economía, que no quiere tocar las restricciones al 'corralito', y el del Banco Central, que pretende liberarlo ya.

El Fondo elaboró un informe a partir de la última visita al país de John Thornton, encargado del organismo para el caso argentino. Pero allí sólo se describe el desarrollo en los últimos meses del sistema financiero, sin recomendaciones puntuales sobre el futuro del 'corralito'.

• Pedido

En cambio, hace un severo pedido de mayor independencia para el Banco Central. Y critica duramente el despido del ex presidente de la entidad, Pedro Pou, y las «operaciones de prensa» que sufrieron las últimas autoridades.

En tanto, hoy durante prácticamente todo el día, en el Ministerio de Economía, explicarán a los integrantes de la comisión internacional «por qué es necesario mantener una postura de gradualismo ante el problema monetario», explicó una alta fuente del Palacio de Hacienda.

Uno de los puntos centrales que planteará el informe de Hacienda es la necesidad de seguir interviniendo con venta de reservas en el mercado cambiario: «Vamos a plantear una idea muy sencilla. Si permitimos que el tipo de cambio siga subiendo, lo único que vamos a lograr es que aumente todavía más la pobreza por culpa de la hiperinflación. No podemos arriesgarnos», explicaron.

En definitiva, el ministro de Economía, Roberto Lavagna, mantendrá firme su postura de no incrementar los límites de extracción de $ 1.200 por mes del 'corralito'. «Por lo menos, hasta que no encontremos solución al problema de los amparos», aseguraron.

De todas formas, en Economía confían en que la situación de reservas se recomponga lentamente, producto de dos desembolsos en efectivo por parte del organismo internacional: u$s 150 millones del Banco Mundial en los próximos tres meses y otros u$s 250 millones del BID.

El directorio del Banco Central, hoy a las 18 con los notables, mantendrá la misma postura que Pignanelli llevó a Washington: liberar ya el «corralito» y redefinir el escenario para los depósitos reprogramados («corralón»).

La propuesta pulida en Washington para el «corralón», siempre y cuando sea liberado el dinero transaccional, tiene las siguientes características:

• Se adelantaría la devolución de $ 10.000 para todos los ahorristas. Además, quienes tienen más que ese monto podrían recuperar esos $ 10.000 en plazos mucho más cortos. «Incluso, no se descarta que sea a fin de año», explicaron altas fuentes del BCRA.

• Liberando estos $ 10.000, quedaría solucionado el problema de prácticamente 80% de los ahorristas que tienen depósitos reprogramados.

• Luego habría otro tramo de $ 10.000 hasta $ 30.000 que también serían devueltos en plazos más cortos (no más de dos años).

• Para el resto del dinero, a los ahorristas se les entregaría un bono en dólares a diez años, pero con dos opciones: puede ser emitido por el Estado o por los bancos.

• Si el ahorrista opta por el bono del banco, la entidad tendrá que pagar $ 1,40 más CER y el Estado pone la diferencia entre este valor y la cotización del dólar.

• Si elige el bono del Estado, en caso de que no cobre será el banco el que lo pague, pero sólo hasta $ 1,40 más CER respecto del título en moneda extranjera.